miércoles, 7 de julio de 2010

Opiniones diferentes. Mi respuesta a un comentario

(Una vez más recibo un ataque, esta vez de alguien del exilio cubano, que para sembrar cizaña, deja entre ver que coincido con Silvio Rodríguez y mi postura esta avalada por el gobierno de Cuba. Aquí tenemos democracia, veámos lo que dice y después mi respuesta. Confío en que de verdad se llame así) (Foto de Internet)

Su comentario:

Raúl Rodríguez Ferreiro dijo: 

 De Revolución a Evolución, esa frase ya se la había escuchado a Silvio Rodriguez; será pura coincidencia? Yo creo que no, todo está bien diseñado, los defensores del Régimen Castrista llamando a la Evolución, la Iglesia Católica repartiendo bendiciones, el Gobierno Español mandando a Moratinos para arrancarle la victoria al pueblo cubano y tenderle una mano al Castrismo para que siga adueñado de Cuba y representando los intereses de España, y los defensores de una Cuba propiedad de España llamando también a la Evolución como lo mismo hacen los Castristas, todo es un enorme tinglao donde todos buscan la mayor tajada y todo a espaldas del pueblo cubano al que una vez más, tratan de arrebatarle la conquista de sus derechos.

 Y el autor de estos escritos además de usar la frase de Silvio Rodríguez, utiliza las mismas frases de la propaganda Castrista cuando llama Republica mediatizada a la Cuba pre-Castrista. 

 Coincidencia, casualidad???. Estoy seguro que no.

 Señores, basta ya de engaños, quienes son Ustedes para adivinar lo que sentían los cubanos hace mas de un siglo, que según ustedes no era lo que recogen los libros de historia, es lo que ustedes dicen y ya está.

 Los norteamericanos intervinieron y se fueron en 1902, y sí lo que quedó fue República mediatizada controlada por los Estados Unidos como entonces pasó lo que pasó?, la llegada de un Comunista al poder que les robó a los ciudadanos norteamericanos, a los españoles, a los franceses, a los italianos, a los cubanos y a todo aquel que tenía una bodeguita o una quincalla. Claro, ahora me tomará la palabra el Clarividente Octavio y dirá que quien puso a Fidel Castro en el poder fueron los norteamericanos para que acabara con Cuba, de esos análisis ya tiene inundada la internet.

 Y además cada vez que Cuba está vinculada con España y esta ultima en situación predominante, ya sea en la época del colonialismo o como ahora con los inescrupulosos inversionistas españoles amparados por ZP y Moratinos,y con el Castrismo como sistema de opresión, el pueblo cubano sufre, pasa hambre, miseria, falta de esperanzas y le son violados cada uno de sus derechos.

 En cambio, con la República mediatizada, o el país como patio de los Estados Unidos o como quieran decirle ustedes que critican esa etapa, no es secreto para nadie que esos fueron los mejores años de la República de Cuba donde se lograron avances impresionantes en todos los campos, y se logró un estado de bienestar que nunca lo hubo antes, ni mucho menos después. Fueron esos los mejores años de Cuba. Y España estaba presente, pero no en actitud predominante, todo lo contrario, la presencia de España era la de masas de inmigrantes que llegaban a Cuba muertos de hambre y gracias a la República mediatizada lograban abrirse camino y prosperar, y enviar dinero a sus familiares en España que estaban muertos de hambre y gracias a esas ayudas además de matar el hambre, compraban animales, abrían pequeños negocios y ayudaban a la prosperidad de la miserable España, años después sucedió lo mismo con los inmigrantes que fueron a Alemania, Suiza, Francia y otros países de Europa. Y el colofón final fue la integración en la Comunidad Europea que sacó a España de la miseria y que poco a poco y con mucho sacrificio del resto de Europa ha ido llevando a España a niveles cercanos a los países del primer mundo.

 En fin, que para los cubanos lo ideal y mas beneficioso es que los españoles sean los inmigrantes, los buscadores de espacio y no nosotros, porque cuando estamos nosotros bajo su dominio, lo único que encontramos es miseria, explotación y hambre.

Así que en el futuro de Cuba debe brillar el sol de la libertad y la independencia que son bajo esos rayos que el pueblo cubano encuentra su prosperidad y dignidad. Todo experimento fuera de esto, lo único que ha traído es llanto y dolor para la nación cubana. 


Publicado por Raul Rodriguez Ferreiro para Cuba Española. a las 7 de julio de 2010 7:26 p.m.

Hola Raul Rodriguez Ferreiro:

 Primero que todo gracias por dejar tu opinión aunque por supuesto no la comparto. Me dices que esa frase de EVOLUCIÓN ya la había dicho Silvio Rodriguez, te diré que no la había oído por él, pero sí de un español que la me dejó hace tiempo en un mensaje y me puso a pensar, me dijo, los cubanos si quieren integración a España, deben olvidarse de la palabra REVOLUCIÓN y usar EVOLUCIÓN, que es lo que se usa en Europa y a mí me pareció genial. Es verdad, las revoluciones en Cuba solo han traído sangre, división, miseria. La de la GUERRA DE LOS DIEZ AÑOS de 1868 al 1878, sólo se enteraron en las provincias orientales, o sea la provincia de Santiago de Cuba y Puerto Principe, desde Las Villas hasta Pinar del Rio, ni se enteraron, ni les importaba la independencia, es más, no la querían. A los orientales no les iba bien en los negocios, mientras que a las provincias occidentales sí. En esa fecha, José Martí estaba estudiando por Madrid, para abogado y Filosofía y Letras, que mala era España?, que a un revolucionario que había deportado a la península, le permitían esas libertades y además meterse en una Logia y empezar a conspirar contra ella. Después se fue a viajar por Europa, más tarde por América Latina, llega a México y se reúne con su familia, se casa, después EEUU, y todo eso mientras los mambises estában luchando por Oriente y Camagüey. Más tarde cuando la Paz del Zanjón, aprovecha la admistía que le da España a los revolucionarios de poder volver a Cuba (Pero que mala era España?) y abre su Bufete de Abogado, tiene cargos en el Partido Liberal, y se postula para las Cortes españolas desde Puerto Principe, pero los orientales y camagueyanos, al ver su actitud pasiva y de viajero cuando ellos peleaban por la Independencia de Cuba, lo criticaron y no le dieron sus votos. Quizás si lo hubiesen apoyado y este hubiese representado a Cuba en las Cortes de Madrid, otro gallo cantaría, tal parece que su revolución fue porque le pisaron el callo y tenía que demostrar que él sí era un patriota y formar esa revolución que fue cruel para Cuba.

La Bandera cubana fue diseñada por el injerencista extranjero Narciso López, que siempre estuvo al lado de España hasta que le pisaron también el callo, cuando cambiaron al Gobernador de la Isla y le quitó los beneficios que tenía de su amigo el gobernador anterior. Yo creo que por eso se une a los esclavistas del sur de EEUU y va a Cuba con mercenarios la mayoría norteamericanos y su idea era independizarla de España y su posterior anexión a EEUU, pero con la esclavitud, por esa razón en Cárdenas no lo apoyaron y así todo es Ciudad Bandera, que manipulada está la historia de Cuba!, o séa es donde por primera vez se ondéa la bandera anexionista y defensora de la esclavitud, por eso nunca seremos un país normal.

 En cuanto a la Leyenda Negra de que Cuba progresó sólo bajo EEUU, te diré que te documentes mejor, lo que pasa es que los mambises con la Tea Incendiaria, destruyeron toda la próspera economía cubana.

Si te leyeras bien mi Blog, sabrías como se expresa el gobierno cubano de mí, que no difiere mucho de tí, tal parece que hablan igual, puedes leer un articulo oficialista en CUBADEBATE, a lo mejor puedes dejarles un mensaje apoyándolos, o en Blogueros REVOLUCIONARIOS y también hablar mal de mí con ellos, pues esa es la opinión castrista de mi persona. De la iglesia católica cubana no me créo nada, pienso que a todos esos curas empezando por el Cardenal Ortega, le tienen un videito la Seguridad del Estado y trabajan para el gobierno cubano por miedo a que salgan cosas súcias a la lúz pública.

En 1845, patriotas orientales como Francisco Vicente Aguilera era propietario de 3 ingenios azucareros en la zona de Manzanillo a Bayamo (Sus riquezas, hacen que muchos expongan que en su tiempo fue el más rico de Oriente. Era dueño de quinientos esclavos y poseía fincas rústicas en Bayamo, JiguaníLas Tunas y Manzanillo, en las cuales había varios ingenios y extensísimas zonas dedicadas al cultivo agrícola y a la crianza de ganado de muy diverso tipo. Sus fincas urbanas no eran menos. En Bayamo eran de su propiedad el teatro de la ciudad, dos casas de pisos múltiples, muchas otras casas de menor tamaño y un almacén de víveres. En Manzanillo otras varias casas y un almacén para mieles.), el Ingenio de Pedro Figueredo (Perucho, el del Himno Nacional) y el Ingenio La Demajagua de Carlos Manuel  de Céspedes "EL PADRE DE LA PATRIA".




En esa época se empezaba a sustituir la fuerza esclava por la maquina de vapor y las transmisiones mecánicas, por lo que había que hacer algo con todos esos esclavos y que mejor que ponerlos a luchar para ellos y por supuesto tenían que ser libres, pues como tú le vas a dar un machete a un esclavo después de años de látigos.  Quiero decirte una cosa, si tú eres una buena persona y tienes mucho dinero como Vicente Aguilera para poder comprar 500 esclavos, desde el día uno que los compras, debes darle la libertad y ponerlos a trabajar en tus negocios decorosamente por un sueldo y no los tienes por años con un Mayoral dando látigos y un día amanece y te das cuenta que ellos merecen la libertad. Estoy seguro que si no se llega a inventar la máquina de vapor para sus ingenios, los esclavos hubiesen seguido siendo esclavos. Esos independentistas lo que querían era sacar a España para ellos gobernar la isla como una finca privada y eso lo lograron los Castro. Esa es la Independencia, la manipulación de un grupito de nacionales a toda la población mediante sentimientos pátrios, pero ni resolvió nada, ni va a resolver nada, porque son peores.


Y sí, los EEUU le hizo a España lo mismo que Castro le hizo a los cubanos con sus propiedades, se las quitó y nos tuvimos que ir, o dime que pasó con todos esos castillos, fortalezas, Palacio de Gobernación y todos los edificios públicos, etc que eran de España?


Me hablas de los inescrupulosos inversionistas españoles invirtiendo en Cuba y te diré que lo mismo hacen negocios los granjero de Texas, y si les permitieran, estuviesen todas las compañías norteamericanas invirtiendo en Cuba bajo los Castro, pues los capitalistas son así y no es malo que tomen ventajas, lo malo son los gobiernos que lo permiten.

Tú eres de los que crées que por nacer en Cuba los hijo de españoles, tenían más derechos que sus antepasados que construyeron todo para que sus hijos nacidos allí,  tuviesen un lugar digno, una casa, una ciudad, una escuela, unos caminos, etc. En Cuba todos somos extranjeros, nadie es nativo, España hizo a Cuba y tus apellidos son españoles, sácate ése veneno. No te consideres inferior a los norteamericanos blancos, ser español es un orgullo, no importa el color de tu piel.

Quizás eres de los que piensas que Cuba lo que necesita es una dictadura al estilo de Pinochet en la que Cuba progrese y a tirar a los comunistas de los aviones, y esa no es la solución, tenemos que progresar como en España, conviviendo los socialistas, los de centro y los de derecha, porque eso es democracia, y si España vino a progresar con la Union Europea, pues perfecto eso es lo que queremos , ser españoles con la Unión Europea y progresar y tener una verdadera democracia como en España, donde todos quepamos, no sólo ó los de un bando, ó los de otro.

Estoy cansado de oír que en España le dicen sudadas a los latinoamericanos y es que éstos se la pasan hablando mal de los españoles, no hay un país de América Latina que no le eche la culpa de todos sus problemas a la colonización, está bueno Yá !. Jamás los he visto hablar de lo bueno que aportaron los ibéricos, desde el idioma, hasta todas esas construcciones, etc. Y si veo a un cubano que vive en España y la critica porque no puede legalizar sus papeles, pues le diré que Cuba española es la solución, así  puede estar legar por toda Europa, qué hay de malo en esto?. Los cubanos no podemos gobernarnos independientes, somos intolerantes. En la unión esta la fuerza y Viva Cuba Española y OLÉ!. J.R.M.


ESTAMOS EN LA FINAL DE FÚTBOL. GANÁMOSSSSSSSSSSS VS ALEMANIA 1 a 0

FELICIDADES PARA TODA ESPAÑA CON CUBA INCLUÍDA!

LLEGAMOS A LA FINAL. EL PULPO NO SE EQUIVOCÓ. Nos vemos el domingo.


No dejen de ver el video con el volúmen en alto.



Entre Máximo Gómez y Valeriano Weyler acabaron con Cuba. Colaboración de Eon Flux
























Ramoncito, tienes que leerte a Fraginals, que al final de su vida vino a carenar a Miami.

Su hijo estudió conmigo en la Escuela Lénin y era muy bueno en natación. 
Un abrazo,
Eon Flux


Moreno Fraginals, ManuelCuba–España, España–Cuba. Historia común. Grijalbo Mondadori, Barcelona, 1995

Por cierto, tambien tienes que averiguar quienes eran los bisabuelos, porque ese apellido se me hace irlandés.



Entre el Weyler y el Gómez, acabaron con la pobre Cuba. Y le dieron pie a Hearst and Pulitzer:

Fue retirado de Cuba en octubre de 1897, cuando Sagasta sustituyó al asesinado Cánovas. Pero el mal ya estaba hecho, y la prensa norteamericana de Hearst y Pulitzer reclamaban a gritos la intervención norteamericana en Cuba, presuntamente para acabar con la «matanza de civiles» aunque en verdad solo pretendían apoderarse de la Isla, ignorando la lucha de los independentistas cubanos.

Nombrado capitán general de Cuba en febrero de 1896 por Cánovas del Castillo, sustituyó al general Martínez-Campos, con órdenes de zanjar los intentos independentistas por la fuerza de las armas. En el breve período que ocupó esta capitanía general solo consiguió frenar un tanto la lucha de los independentistas, y su mayor éxito fue la muerte en una escaramuza del Titán de Bronce, Lugarteniente General Antonio Maceo y Grajales, pero a pesar de estos los "mambises" cubanos estos siguieron siendo particularmente fuertes en el centro y el oriente de la isla, donde las largas campañas de verano destruyeron las fuerzas españolas al son de las enfermedades y las tácticas guerrilleras del general Máximo Gómez Baéz, jefe militar máximo de los independentista, para entonces Weyler ordenó el encierro forzoso a la población rural del occidente cubano en campos de reconcentración, hecho conocido en la historia como la Reconcentración de Weyler.
La proclama que daba inicio a la reconcentración decía:
1. Todos los habitantes de las zonas rurales o de las áreas exteriores a la línea de ciudades fortificadas, serán concentrados dentro de las ciudades ocupadas por las tropas en el plazo de ocho días. Todo aquel que desobedezca esta orden o que sea encontrado fuera de las zonas prescritas, será considerado rebelde y juzgado como tal.

2. Queda absolutamente prohibido, sin permiso de la autoridad militar del punto de partida, sacar productos alimenticios de las ciudades y trasladarlos a otras, por mar o por tierra. Los violadores de estas normas serán juzgados y condenados en calidad de colaboradores de los rebeldes.
3. Se ordena a los propietarios de cabezas de ganado que las conduzcan a las ciudades o sus alrededores, donde pueden recibir la protección adecuada.

El plan de Weyler, al alejar a los campesinos de sus tierras, resultó en la pérdida de las cosechas, provocando una hambruna generalizada, que unida a las enfermedades provocadas por las pésimas condiciones de salubridad en los campos, terminaron diezmando a la población. La situación se complicaba a medida que avanzaba la guerra. Los sufrimientos y calamidades aumentaban por la irregular forma de vida en barracones, almacenes o refugios abandonados, durmiendo en patios o a la intemperie, en condiciones higiénicas deplorables, y sin acceso suficiente a alimentos.
Es difícil determinar con certeza la cantidad de personas reagrupadas como consecuencia de las órdenes dictadas por Weyler. Se estima que para diciembre de 1896 unos cuatrocientos mil cubanos no combatientes se catalogaban como reconcentrados en lugares escogidos o no con ese objetivo. Más difícil aún es establecer las cifras exactas de fallecidos, pero se estima que entre 750.000 y 1.000.000 de cubanos murieron en los campos de concentración creados por Valeriano Weyler (imposible dado que la poblacion de Cuba en 1895 era de 1.500.000 habitantes), aunque algunas fuentes más conservadoras establecen la cifra en algo más de 300.000. Aún antes de terminada la guerra cubana, los muertos caídos en el campo de batalla, por las enfermedades y la reconcentración decretada por Weyler, ascendían aproximadamente a la tercera parte de la población rural de Cuba.
La reconcentración acabó hacia marzo de 1898, en pro de la nueva política pacifista propiciada por el general Ramón Blanco y Erenas e impuesta por las circunstancias.
Sobre Cuba pesaba la enorme fatiga de casi cuatro años de lucha y el cansancio acumulado de la Guerra de los Diez Años, la Guerra Chiquita y la batalla cotidiana del exilio durante los quince años de paz preparando una nueva guerra. Sobre los campos cubanos desolados por la reconcentración ordenada por Valeriano Weyler se había llevado a cabo una lucha que agotó los recursos españoles, quienes a su vez dominaron todos los centros urbanos fundamentales, hasta la rendición de Santiago de Cuba. España se había obligado a mantener sobre las armas a tantos soldados como hombres cubanos en edad militar. Miles de estos hombres pelearon en el campo con las tropas insurrectas que en continua movilidad evitaban todo encuentro frontal, ya que precisamente su objetivo era mantener dividido y disperso al ejército español. De esta forma la guerra se alargaba, paro no se exponía el triunfo cubano al resultado de una sola batalla contra un ejército cuyos jefes estaban formados en las modernas técnicas militares prusianas. El tiempo estaba a favor de la causa cubana. La famosa frase de Cánovas del Castillo pronunciada poco antes de morir:[4] «Hasta el último hombre, hasta la última peseta», era una prueba de que hombres y pesetas se estaban agotando en España. La tardía concesión de la autonomía, no aceptada por los revolucionarios, y exiguamente impuesta en las ciudades, fue también muestra de la debilidad española. Naturalmente que librar una guerra de agotamiento exigía una altísima dosis de reciedumbre.
Moreno Fraginals, págs. 338–339


Mi opinión:

 La revolución de José Martí fue un error, trajo mucha sangre, hambre muerte y destrucción por toda Cuba y eso sirvió de caldo de cultivo para la invasión norteamericana y quedarse con la isla. El cubano no quería eso. Fue algo impuesto, el generalísimo Máximo Gómez cometió un error con la Tea Incendiaria y lo de Weyler fue la reacción exagerada a esa acción de destruir a toda Cuba por parte de los mambises. El pueblo cubano no quería eso. Para mí, el primer culpable fue Máximo Gómez que empezó con esa orden tan cruel. Basta de REVOLUCIÓN y transformémosla en EVOLUCIÓN. J.R.M.

Weyler rumbo a Cuba

HERALDO.es de Aragón

Zaragoza a 22 de Enero de 1896

El general Weyler pone rumbo a Cuba

En el expresso de barcelona pasó esta madrugada por la estación del Campo del Sepulcro el general Weyler, nombrado gobernador general de Cuba.

Esperábanle en la estación, el señor comandante en jefe de éste cuerpo de ejercito, señor marqués de Ahumada, y el digno presidente de esta audiencia territorial, señor García Briz, ligados ambos, por antigua y estrecha amistad, con el general Weyler.

También esperábamos nosotros para saludar en nombre del Heraldo De Aragón, al bizarro general que marcha a mantener la integridad de la patria en aquellas apartadas regiones.
Conferenció el señor Weyler brevísimos momentos con sus distinguidos amigos y merecimos, después del excelentísimo señor marqués de Ahumada, el señalado honor de ser presentados al ilustre generalen quien hoy tiene España puesta su atención y su confianza toda.

Breve, muy breve fue la entrevista que tuvimos con el general Weyler, aprovechando los cortos instantes de parada que hace en Zaragoza el tren expreso.

El general nos recibió con exquisita amabilidad y cortesía que agradecimos sinceramente y cumplimos el encargo de saludarle en nombre del Heraldo, expresándole nuestro deseo de que vuelva de Cuba victorioso, cubierto de gloria y asegurando la paz en aquella provincia española.

El general Weyler, agradeció el saludo del Heraldo, y mostrose complacidísimo, tanto por la acogida que su nombramiento ha merecido a la opinión, cuanto por la espontánea y entusiasta despedida que se le ha hecho a su marcha de Madrid.

Manifestó sus propósitos de terminar la guerra, sin violencias, haciendo únicamente justicias, castigando a los enemigos de España y sin hacer política ni inclinarse por ninguno de los partidos antillanos. Dijo que en Cuba cumplirá su deber que no es otro que terminar la insurrección.

Se le manifestó la noticia telegráfica que teníamos, y que ya conocen nuestros lectores, de haber abandonado su residencia en La Habana, trasladándose a Tampa, ciento cincuenta familias cubanas, y el general contestó que, si conociendo sus propósitos, que son únicamente hacer justicia, abandonaban Cuba para ir a Tampa, era evidente que algo tenían que temer y que seguramente no serán esas familias muy afectas a España. Complaciole mucho la respetuosa despedida que se hizo en La Habana al general Martínez Campos, de que también le dimos cuenta.

Como circulan noticias contradictorias acerca del día de su embarque, preguntele qué había de cierto, y el general nos contestó que él pensaba embarcar el día 25 en Barcelona, a bordo del vapor Buenos Aires, pero, como el deseo del gobierno y del general era ganar días, este vapor adelantaría sus escalas, todo lo posible, procurando salir de Cádiz el día 28. Por último, y cuando, ya próximo a partir el tren, nos despedíamos todos con el mayor afecto, el general me dijo que, ya nombrado y conociendo sus propósitos, era preciso que la prensa de la Península le secundase ejerciendo su poderoso influjo en la opinión pública, en bien de la pátria.

Sonó la campana de la estación, partió el tren expreso y los allí reunidos saludamos por última vez al general Weyler, quedando el Heraldo muy agradecido y obligado a sus atenciones, tanto como las que mereció su representante, del señor marqués de Ahumada y del presidente de esta Audiencia.

(Una colaboración de Iván)