martes, 20 de julio de 2010

Videos de un recorrido por Caimito, Cuba


Quiero invitarlos a que vean dos videítos de mi pueblo Caimito en Cuba, cortesía de Bello. También que visiten el Blog de Caimito para que vean más fotos.






Los desterrados cubanos piden no ser separados y exigen mejores condiciones


ESPAÑA


Insisten en que se encuentran en un «limbo jurídico» y sin un estatus claro tras su llegada a España


Los siete presos políticos cubanos arribados a Madrid el martes último han pedido hoy un trato «digno» y más honesto por parte del Gobierno español. Fue durante una conferencia de prensa realizada en la Asociación de la Prensa de Madrid, donde Normando Hernández González, uno de los prisioneros del régimen castrista durante siete años, declaró: «Si el Gobierno de Zapatero se ha comprometido a acogernos en España, pienso que lo más digno sea que nos de el estatus que merecemos y que nos de las condiciones humanas que nos merecemos».
Pese a que el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, anunció que los prisioneros llegaban a España en condición de «inmigrantes», los siete periodistas aclaran que no saben su condición. «Estamos en un limbo jurídico. El estatus está siendo definido por el Ministerio del Interior, no sabemos el trato legal que por fin se nos va a dar», respondió Ricardo González, corresponsal de la ONG «Reporteros Sin Fronteras», que añadió: «Lo que es obvio es que ni somos criminales ni venimos aquí por una situación díficil económica en nuestro país, somos perseguidos por nuestras ideas». Julio César Gálvez, quien estaba condenado a 24 años de cárcel por disidir con el régimen de La Habana, sumó: «Yo no soy un inmigrante, soy un perseguido político». Según han declarado a la prensa, Pablo Pacheco, Omar Ruiz y Antonio Villareal ya se han decidio a solicitar el estado de refugiados políticos.
Unidos y en un «hogar»
Según el plan de acogida diseñado por el Gobierno español y la Cruz Roja, está estipulado que los disidentes sean repartidos por diferentes centros para inmigrantes de Málaga y Valencia en los próximos días. Sin embargo, ellos no están de acuerdo con esa decisión. «Queremos permancer juntos, pero yo no soy dueño de mí aquí en España. Estoy en una prisión sin barrotes», confesó Gálvez, quien no veía a sus compañeros desde hacía casi ocho años. «Me han dicho que iré a Málaga, a un centro de acogida donde se reciben a inmigrantes llegados en pateras desde África, pero no sé nada más», reveló González.
El actual alojamiento que se les ha dado en un hostal de Vallecas también ha sido objeto de críticas. «En mi caso particular, soy una persona que sufre de un síndrome de mala función intestinal, que tengo que ir al baño varias veces al día, y tengo que compartir un baño colectivo, cosa que me es muy díficil», explicó Hernández, y agregó: «No me siento con la privacidad que yo requiero después de siete años siendo torturado por las cárceles castristas». Según le han informado, en breve deberá ser trasladado a un centro de acogida en Cullera, Valencia, aunque no sabe lo que le espera. «No pedimos un hotel cinco estrella, solo unas condiciones mínimas», concluyó.
El grupo de disidentes fue contundente respecto al plan de Moratinos para que la UE abandone la «Posición Común» frente a Cuba. «Que España no muerda el anzuelo, los gobiernos democráticos deben defender la democracia», sentenció el corresponsal cubano de «Reporteros Sin Fronteras», quien calificó la decisión de Cuba de liberar a prisioneros de conciencia como una «pantalla de imagen».