domingo, 4 de septiembre de 2011

CONTROVERSIA POR “PROFESÍAS” DE SAN ANTONIO MARÍA CLARET SOBRE EL FÍN DE CASTRO


Del Periódico aciprensa

(Noticia vieja, pero vigente aún)
El diario español La Razón causó revuelo en la opinión pública internacional con un reportaje en el que asegura que San Antonio María Claret profetizó a mediados del siglo XIX que Cuba se insertará en el concierto de naciones luego de la muerte de Fidel Castro “en cama” y un breve periodo de violencia interna.
La Razón recogió testimonios y escritos del santo español que fue Arzobispo de Cuba entre 1851 y 1857. De acuerdo a sus fuentes y una fuerte tradición oral, la Virgen de la Caridad del Cobre reveló a San Antonio, mientras recorría las montañas de Santiago de Cuba, que la Isla sufriría una dictadura de más de 40 años, que terminarán con la muerte del líder (Castro) en su cama y el “derramamiento de sangre”.
El diario sostiene que las palabras de San Antonio “se han convertido en una leyenda de transmisión oral que ha pasado de generación en generación y que ahora vuelven a estar muy presentes ante la situación que se vive en la isla y el delicado estado de salud de Fidel Castro”.
La historia

El incansable misionero nació en 1807, en Cataluña. En 1851, partió rumbo a Cuba con el encargo de ser Arzobispo de Santiago. Llegó el 18 de febrero de ese año, y consagró su actividad pastoral a la protección de la Virgen de la Caridad del Cobre, patrona de todos los cubanos, de quien también fue un entusiasta devoto.

Según la tradición, el Padre Claret estaba recorriendo las zonas montañosas de Santiago cuando se le presentó la Virgen de la Caridad para predecirle el futuro de Cuba, profecía que luego el sacerdote transmitió a sus parroquianos y seguidores.

La revelación de la Virgen “hablaba de un joven muy osado (NDR – Castro) que subiría por esas mismas montañas con las armas en la mano, y después de unos años bajaría triunfante con una espesa barba, acompañado de otros hombres también barbudos y con largos cabellos. Esos jóvenes traerían, colgando de sus cuellos, medallas de la Caridad del Cobre y crucifijos que en poco tiempo dejarían de usar, para luego negar con vergüenza sus creencias”.

La profecía citada por La Razón agrega que el joven líder “sería aclamado por todos a causa de numerosas reformas de beneficio popular, se iría apoderando poco a poco de todo el poder, sumiendo al pueblo cubano bajo una férrea dictadura que duraría 40 años, en los cuales Cuba sufriría numerosas calamidades y penurias. Finalmente, ese hombre moriría en la cama”.

Tras su fallecimiento, continúa la profecía, “se produciría un corto período de inestabilidad y enfrentamientos, en los que incluso llegarían a producirse algunos derramamientos de sangre, aunque luego la nación cubana volvería a levantarse poco a poco hasta llegar a ocupar un destacado lugar en el ámbito internacional”.

El 22 febrero de 1857, San Antonio María Claret partió de regreso a España al ser nombrado confesor de la Reina. Fue despedido por una multitud en el puerto de Santiago de Cuba.