Sin dudas que el caso cubano es muy atípico en todo. Somos el único país de America Latina con un sistema socialista-comunista, con una dictadura de más de 50 años, y un país sin identidad propia.
No es menos cierto que siempre fuimos la más española en todos los paises latinoamericanos. Al no tener nativos, pues la cultura nativa es desconocida, solo algunos nombres que recordaban los españoles de cuando llegaron a Cuba y que usaban los indígenas cubanos. Sabemos que vivían de la pesca, comían el casabe que era proveniente de la yuca, que es un tubérculo, el cual tenemos en la gastronomía cubana gracias a que los españoles la cocieron y le agregaron un mojo y así aparece en nuestra comida tradicional.
Los esclavos africanos que llegaron años después cuando hacia falta mano de obra para cultivar la tierra, especialmente la caña de azúcar que trajeron los españoles, llegaron desnudos. De África los esclavistas trajeron también un tipo de plátano macho para alimentar a los esclavos y era diferente al plátano que existía en España. Los españoles no podían permitir que los eslavos estuvieran desnudos, pues había mujeres y niños, además había que proteger sus partes de accidentes, etc. Les confeccionaron una ropa sencilla y blanca. En el caso de las mujeres, la vestimenta tampoco era tan sencilla, más bien al modelo de la época y blanca pues el teñir las telas era un lujo en esa época. De ahí que los trajes de los santeros sea blanco, pero no tiene nada que ver con África, pues repito, ellos vinieron desnudos.
Los africanos trajeron en sus mentes sus instrumentos musicales y sus deidades. Poco a poco los fueron confeccionando y comenzaron a practicar su religión, la cual fueron sincretizando para ir acorde con los de la religión católica que le estaban imponiendo. La religión afrocubana se fue transformando. En Cuba no existía el árbol sagrado que tenían en África, pero existía la Ceiba que es uno parecido y de la misma familia y la bautizaron así. Comenzaron a ofrecerles frutas tropicales que no había en África y todo ha ido cambiando según donde estén, por ejemplo en Miami se les ofrecen manzanas, kiwi, etc., que no hay en Cuba.
La cultura del negro cubano, es la misma del blanco cubano o mestizo, ellos no trajeron nombres, o sea que no hay nombres africanos entre la población, ni un dialecto, ni una gastronomía distinta a la del blanco, todo es lo mismo, la misma moda, el idioma, las costumbres. No hay segregación, no existen barrios negros y barrios blancos, las personas se han ido mezclando sin problemas y no hay, al menos eso quiero creer yo, diferencias entre un negro cubano y un blanco a no ser por parte del gobierno que no les dio las mismas oportunidades en los altos puestos políticos. La cultura del negro cubano es mayormente española igual que el mestizo y el blanco y que el chino que también tenemos algunos.
Ahora bien, que paso con esa Cuba tan española? Primero que todo al llegar la separación forzosa de España por parte de EU, nos vislumbramos con el confort norteamericano y cambiamos muchas cosas, por ejemplo se dejo de cantar el “Cumpleaños Feliz”, y se cambió por el “Happy Birthday to You”, y en vez de “aparcar” se dice “parquear” de la palabra “parking” y nos fuimos americanizando, pues en realidad teníamos que inventar un país porque éramos españoles en todo sentido. Mas tarde llegaron los Castro y ahí se jodió todo.
Como sabemos Fidel Castro es un hijo bastardo. Su padre un gallego que hizo una fortuna en Cuba, estaba casado y contrató a una señora y a su hija menor de edad a trabajar a su casa. Con esa menor tuvo a Fidel, al cual le negó sus apellidos por años y lo envió a vivir con una familia negra por un tiempo. Su papa mas tarde se casa con la mama de este y tiene mas hijos. El padre tenía negocios de suministrar caña de azúcar a una compañía norteamericana muy poderosa en Oriente.
Fidel creció con un odio y un resentimiento enorme hacia España y los norteamericanos que hacían negocios con su padre y gracias a ese dinero estudió en el Colegio Católico de Belén, el mejor de Cuba, también se hizo abogado y vivió del dinero de su padre, pero el odio lo llevaba por dentro.
Trato de ir eliminando la huella española en Cuba, donde la gran mayoría de la población era blanca descendiente de españoles o españoles de nacimiento. Desde el comienzo de la revolución hizo que esa gran población blanca tuviera que irse de Cuba, a la vez traía una cultura soviética muy diferente a la nuestra tan española. Llegaron los nombres rusos, las comidas, y todo del campo socialista europeo. Acabó con las tradiciones como las verbenas, las romerías, las procesiones, todo lo que recordara España. Comenzó a nacer un cubano sin historia, sin identidad. La identidad cambia, hemos tenido periodos chinos. También trataron de introducirnos la música latinoamericana con instrumentos extraños y surgieron grupos musicales como Moncada, Manguare, etc.
Se trató también de haitianizar la cultura, y como hico la familia Duvalier al ayudar a difundir el Vudu y de esa forma controlar a las personas mediante el miedo a lo desconocido, en Cuba se ha hecho lo mismo con la santería y hay un férreo control y un negocio lucrativo.
Ya los trajes “típicos” que usan las mujeres descendientes africanas por la Habana Vieja atrayendo al turismo tirandole los caracoles, etc., no son los blancos de la época, ahora tienen colorines, dándole un toque africano que no existió. Se pinta edificios históricos como por ejemplo en la Plaza Vieja, con colores fuertes como en Haití y las Bahamas, cuando en realidad eran blancos o colores muy sobrios y lo único colorido eran las vidrieras o vitrales. La Habana elegante, señorial y sobria, se esta convirtiendo en la carnavalesca del Caribe y todo es para darle un toque inventado de una Cuba que era 6 provincias españolas de ultramar y que comenzó una Comunidad Autónoma de España. Fidel siempre ha querido borrar la huella española en Cuba pero no ha podido, ni podrá, porque el cubano aunque sea mestizo y hasta en muchos casos negros, lleva a España en su corazón.
Cuando vemos la gracia de la mulata cubana, ahi esta representada la gracia andaluza mezclada con el color de la piel africana. Cuando yo veo reportajes desde África, no he visto en su mujeres la gracia de las negras y mulatas cubanas, eso es andaluz. Tampoco el tambor africano suena tan lindo como el cubano, que lleva la mezcla con los ritmos españoles. El africano es monótono, el cubano es armónico. El negro cubano es totalmente extranjero en África, no conoce su lengua, su gastronomía, sus costumbres, es netamente español aunque su carrocería sea diferente.
José Ramón Morales
Miami, 24 de julio del 2009
Ojo, es un poco arriesgado decir que no tenemos identidad. Creo que el pueblo cubano sí tiene identidad propia, precisamente por ser un pueblo formado por tanta inmigración, somos permeables a nuevas culturas.
ResponderBorrarpepitogrillo
Hola pepitogrillo;
ResponderBorrarPero cual es la verdadera cubania?, la de los cubanos de tuvieron que emigrar a principio de la revolucion?, la de los munequitos rusos?, la de Generacion Asere?, la de Generacion Y?. Cuales son nuestras tradiciones?, yo ya no lo se.
Un abrazo
Hoy he visto una entrevista que hicieron a Ferndando Sánchez Dragó, un escritor español bastante conocido que dijo en una entrevista que él se sentía profundamente avergonzado de ser español. Y dijo una retahíla de críticas a España y a los españoles, en que justificaba su desgana y pesimismo. Es un escritor que goza criticando a España y a los españoles. En la entrevista que he visto hablaba Dragó de la identidad española, y venía a decir que España era un país sin identidad, porque Zapatero había cambiado aquella identidad auténtica de la España de Menéndez Pidal o de Gasset, para llegar a una España hortera.
ResponderBorrarPero luego el propio Dragó (que ha publicado muchos libros criticando a España) tenía que reconocer que en realidad él estaba hablando en español, que estaba en la calle La Castellana, en Madrid, y que en realidad sí había una España, y sí que había una identidad española, porque él mismo era muy español.
Y yo creo que aquí está el quid de la cuestión: usted como yo tenemos una identidad, somos cubanos. Más allá de que también nos pongamos el membrete de "español", si a nosotros se nos pregunta ¿De dónde eres? Responderemos: Soy de Cuba.
Tengo 21 años, dentro de 20 años me volverán a preguntar: ¿tú, de dónde eres? Y yo responderé lo mismo. Soy de Cuba.
Esto lo digo no por exaltación de nacionalismo ni por hacerme el más cubano, ni por sentimentalismos de gorrión mojado. Lo digo porque aunque también tengamos una identidad española (en mi caso por sangre, pero sobre todo por naturalización) somos en esencia cubanos.
Y cuando digo que somos en esencia cubanos, me estoy refiriendo a esa cubanía que usted muy bien ha explicado en esta página a base de pura Historia, pero que no es desde el punto de vista sincrónico una cubanía española, sino simplemente cubanía. Es decir, cubanos y españoles son primos, no hermanos ni padres e hijos. Esto lo digo visto desde hoy. De forma que hay un primo cubano, y un primo español, que se encuentran, pero que no son lo mismo, por mucho que hayan partido del abuelo común.
A dónde quiero llegar es a donde Dragó ya ha llegado aunque no quiera reconocerlo, pues su negocio se monta en la crítica a España y a los españoles. Aunque Dragó diga que ya no hay una identidad española, él mismo se da cuenta de que dice un disparate, porque él mismo se reconoce español, y él mismo reconoce sentir vergüenza de ser español. Y esto de ser español y de ser cubano es una cosa que se nota y se ve. Usted pone a un español y a un cubano uno al lado del otro, y los diferencia... (Otra cosa es poner a un canario y a un cubano, ya sabemos que el dialecto cubano y el canario están emparentados) Luego sí hay una identidad española, y sí hay una identidad cubana, aunque la identidad cubana ( y la cubanía, es decir, la abstracción de la indentidad cubana) esté precisamente cimentada en la gran permeabilidad a la influencia extranjerizante.
Permeabilidad que por otra parte también compartimos con España. Recordemos a otro que también era un gran criticón de España y los españoles, el escritor y pensador Cadalso, cómo en sus Cartas Marruecas habla de los afrancesados. Es una pena que los cubanos no toleremos que los propios cubanos nos critiquemos.
Y no me extiendo más... pepitogrillo
Hola pepitogrillo;
ResponderBorrarGracias por tu comentario. Claro que el cubano tiene una identidad, pero es muy cambiante, no hay conformidad, vamos por generaciones, somos muy inestables. Si comparas con México, veras que todavía se les ponen nombres a los hijos como Guadalupe, sigue una tradición muy mexicana. También como mencione antes, en Andalucía hay una tradición muy andaluza que se repite, y los San Fermines, y las Fallas de Valencia, etc., nosotros no. Hasta los carnavales de Miami que trajimos los cubanos y se hizo la fiesta mas grande hispana de EU, nos lo dejamos arrebatar y ya no se llaman Carnavales Cubanos, ahora es el Festival de la Calle 8, una fiesta de todos los latinos, donde ya no hay desfiles de carrozas, etc. ya esa tradición cubana nos la dejamos arrebatar y es porque no nos importa nada, las tradiciones se nos olvidan. También trajimos el “Desfiles de los Reyes Magos”, y ya es una pena y un bochorno con esos desfiles, ahora son solo fiestas de candidatos políticos y anuncios de ventas de coches, seguidos de tres camellos caquécticos con tres reyes mal disfrazados. Déjame decirte que yo me siento orgullosisimo de ser cubano, somos el grupo minoritario de EU con más poder económico y político en menos tiempo y hemos logrado lo que no han logrado otras comunidades, además somos muy generosos con todos los que lo necesitan. Basta que haya un desastre natural en cualquier país, que el cubano enseguida se bota para la calle a recoger ayuda, pero tengo que decir la verdad, porque sino nos creemos que somos el ombligo del mundo. Tenemos el Miami Medical Team, que es un grupo de médicos cubanos que van por diferentes países operando y salvando vidas con un avión equipado y todo eso es dinero privado de ellos mismos.
Estas críticas, son más bien respondiendo a algunos comentarios que han hecho diciendo que no podemos pertenecer a España pues somos diferentes, como si la nación española fuera monolítica. Creo que somos mas españoles que los vascos cuya lengua no tiene nada que ver con la castellana, por solo citarte un ejemplo.
Un abrazo
José Ramón, soy asidua lectora de tu blog, aunque no siempre te deje un comentario.
ResponderBorrarSé que eres un gran defensor de nuestras raíces españolas y que sueñas con que Cuba sea una provincia más de España.
Pero eso no implica que no tengamos identidad propia, creo yo.
Las raíces de la cultura española al llegar a Cuba se adaptaron a la nueva realidad cósmica, no solo del entorno geográfico climatológico, sino también al entorno socio politico y económico diferentes a los de España, por lo tanto esa cultura dejó de existir en su estado puro para adquirir uno nuevo en correspondencia con el nuevo medio en el cual se asentaba y manifestaba. Este proceso duró siglos hasta que adquirió su propia forma.
La rumba flamenca interpretada y bailada en Cuba es diferente a la genuina española, como también se diferencian las habaneras cubanas de las habaneras de Cádiz. En Cádiz se celebra anualmente el Festival de habaneras, en Cuba no.
La cultura española a la isla llega y se establece a partir de los propios conquistadores y colonizadores, se perpetua con sus descendientes criollos quienes le dan un toque especial, sobre todo a partir de los finales del siglo XVIII y durante todo el siglo XIX, dado el afán de los criollos de sentirse y saberse diferentes, lo cual los lleva a una constante demarcación entre lo cubano y lo español, apuntando constantemente las diferencias entre peninsulares e insulares, diferencias que los llevaría a la lucha por la independencia de Cuba de la madre patria.
Es cierto que la histora ha demostrado que hemos seguido unidos, más allá de la política. Basta recordar que durante la primera mitad del siglo pasado las emigraciones de españoles a la isla se mantuvieron constantemente a pesar de que Cuba ya no era colonia de España.
Creo que a los españoles no se les ha olvidado la frase "la ponderada y siempre fiel Isla de Cuba" que nos diferenció del resto de las otras colonias de ultramar. Quizás por esa gratitud también ocupemos un lugarcito en el corazón de cada español que ve a Cuba como un puerto seguro.
En la primera mitad del siglo pasado la veían como un lugar propicio para establecerse como colonos,( no ya ya como colonizadores) fundar familias y progresar económicamente para luego regresar al terruño español. En ese sentido Cuba era vista como una fuente de posibilidades económicas, transitorias.
En este último medio siglo, los primeros europeos occidentales en establecer negocios con la dictadura castrista fueron (y se mantienen como los más constantes, interesados y solidarios con el gobierno de Cuba) los españoles.
No sé qué rumbos tomará la historia, pero de alguna manera seguimos vinculados al cordón umbilical que una vez nos unió a la peninsula Ibérica...Aunque mantengamos las grandes diferencias.
Saludos, Esperanza