domingo, 8 de noviembre de 2009

Raúl Castro, salva a tus nietos, te queda poco tiempo.‏



Fue asesinada por la cúpula gangsteril castrista la vía española, ahora sólo está en la mesa la "Revolución de los Claveles", tropical. Sigue en la península ibérica el paradigma, pero sólo en la versión portuguesa.

Llevo años promoviendo la Revolución de los Claveles Tropical, pero también llevan años saboteándola los pandilleros que encabezan la tiranía castrista y sus cómplices a nivel internacional, entre los cuales se descata enormemente el gobierno de Estados Unidos y el de Zapatero, con la obvia acción u omisión favorable al castrato por parte de la Casa Real Española.

Ese mismo rey que se dice apoyó a Adolfo Suárez para que se hiciera posible la transición está hoy o absolutamente degenerado o prisionero de los intereses peninsulares que lucran con la total falta de derechos individuales por parte del pueblo secuestrado de Cuba, país al que la tiranía de los Castro ha convertido en el más genuino remedo de un avión secuestrado en donde reina la voluntad y la violencia de los secuestradores, y en el cual los rehenes y sus familiares han sido convertidos, al menos desde el punto de vista de la tiranía, en insectos fumigables sin ningún valor, excepto para explotarle su mano de obra barata y desprotegida.

Luego del desmerengamiento del asesino cobarde en jefe, es decir, el tirano Fidel Castro, la rata miserable al servicio de la plutocracia norteamericana, se le presentaba a Cuba la posibilidad de una vía similar a la española en función de ingresar en la Unión Europea; consolidado el viceasesino cobarde Raúl Castro, todavía a la sombra del asesino mayor, y purgado Carlos Lage, el probable Adolfo Suárez Cubano, la pandilla gansteril en el poder asesinó definitivamente esa opción.

Compatriotas cubanos, espanõles y demás personas solidarias con nuestra causa, sólo nos queda la Revolución de los Claveles Tropical, cuya esencia conocerán si leen nuestra página principal de principio a fin (octaviodilewis.com).

Independiente del perfil de cada grupo o persona anticastrista, cuando se lea a fondo el contenido llegarán a la conclusión de que la REVOLUCIÓN DE LOS CLAVELES TROPICAL, la salida portuguesa a la libertad y al progreso de la mano de la Unión Europea, pero en versión tropical, resulta casi nuestra única opción viable en estas circunstancias, siempre y cuando desconfiemos profundamente del gobierno de Estados Unidos y el de Zapatero, y nos apoyemos en varios gobiernos europeos decentes (todos sabemos cuales son pero es mejor no nombrarlos aquí).

No podremos saber a ciencia cierta si Raúl Castro es tan extremadamente diabólico, satánico, como su hermano Fidel Castro, hasta tanto el monstruo asesino mayor no haya muerto, porque se sabe que el vicetirano siempre ha sido una marioneta de su cobarde y asesino pandillero jefe.

Lo que sí está claro es que si Raúl Castro no colabora con el cambio no logrará que su familia sea perdonada y no podrá evitar que tenga que sufrir las consecuencias de los actos de él, su hermano el pandillero jefe y el resto de sus secuaces por más de cinco décadas.

Por muy racionales y decantadores que seamos muchos no cabe dudas que somos minoría.

La abrumadora mayoría, cuando al cambiar el poder y el mando ya se les acabe a los pandilleros y familiares la impunidad y la protección del gobierno de Estados Unidos (que es el primero que arresta y destruye a cualquier cubano que le quiera tirar aunque sea una piedra a un castrista), liberará contra la familia de Raúl Castro y Fidel Castro, incluso contra los inocentes, todo el rencor y la frustración extrema acumulada durante más de medio siglo. Serán linchados hasta los nietos de Raúl Castro y nosotros poco podremos hacer para evitarlo.

El único que lo puede evitar, desde ya, es Raúl Castro; si es verdad que ama a sus nietos que los salve ahora; que haga algo para matar en parte el rencor acumulado. Que cumpla la sentencia del tribunal de la patria, que agarre al viejo engendro mefistofélico y asesino, su abusador hermano, lo lleve al menos a un décimo piso y lo defenestre, lo tire por una ventana con silla de ruedas y todo, y luego realice las gestiones necesarias para que se produzca la transición, versión española con Adolfo Suárez incluido.

Si Raúl Castro no es capaz de salvar a sus nietos atenuando el rencor acumulado mediante la implentación de la transición al estilo de la española y sólo queda la opción de la Revolución de los Claveles Tropical, muy poco podremos hacer por salvar a sus nietos; el rencor y el dolor los cazarán en cualquier parte del mundo en que se metan y se vengarán en sus cuerpos materiales y en su espíritu aunque sean inocentes de todas las desgracias que les hizo padecer su abuelo, Raúl Castro y su tio-abuelo, Fidel Castro.

Ya el menor de los Castro está cerca de su última afeitada, que se apure y use el poco tiempo que le queda no para salvar la patria, la cual a él y a su hermano nunca les ha importado un bledo. Que se limite a salvar a sus nietos, y para resultar efectivo que empiece pronto, no sea que tenga que despedirse de este mundo con la carga brutal de visualizar cómo en cualquier esquina uno de sus nietos es sometido al garrote vil u otro espeluznante acto de venganza.

Ten en cuenta, Raúl Castro, que tu propio aparato represivo, abrumadoramente oportunista, de seguro se prestará a cazar en el mundo a tus nietos, para entregarlos como corderos en sacrificio al nuevo poder, o a los nuevos grupos privados con recursos y buena paga.

Apúrate Raúl Castro en esta, tu última afeitada; no salves a la patria, el pueblo cubano no es retrasado mental, no espera eso de ti; limítate a salvar a tus nietos, y aumenta un poco la velocidad para ver si logras salvar también a tus hijos, el coronelito, la aventurera italófila...

5 comentarios:

  1. Hace tiempo que lo he dicho aqui en este blog.

    España no es su solucion.España cmo concepto politico aun existe.Pero nada mas.....

    No esperen vds. nada de la sociedad española,ideologivamente corrompida y ausente total de valores.

    Les aconsejo exploren otras vias.

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  2. personalmente me opongo a la postura del anterior comentario, por varios motivos que paso a enumerar:

    En primer lugar, España SI es una de las multiples soluciones que se le presentan a Cuba. En que apoyo mi postura? en los vinculos historico-politicos que unen a los dos territorios, por no recordar casos de cooperacion entre ambos gobiernos no ya entre la epoca democratica española, sino con Francisco Franco.

    Paso a relatar un hecho que a mas de uno le causara asombro pues, cuando los nacionales ganaron la guerra, de los pocos paises que no levantaron la embajada y se ausentaron, junto con Argentina quedo Cuba.

    Gesto que fue devuelto posteriormente por el gobierno Nacional, en la etapa de Franco insisto, España no imponia embargo comercial a Cuba, a pesar de las diferencias politicas que resaltaban aun mas en ese periodo.

    Que pretendo mostrar mediante este ejemplo? el especial vinculo que une a ambos pueblos, ya que si en esas etapas de ideologicas extremas aun asi mantenian un trato no ya solo cortes, sino cooperativo, como no va a ser España un apoyo para Cuba, pues haga lo que haga esta, España seguira queriendo a Cuba, es un sentir popular, nos caen bien y sentimos cariño por ellos y por la isla, eso en las gentes de a pie, en la generalidad de la nacion española.


    Cierto es que la sociedad española atraviesa un periodo de desorientacion, el 4º poder estatal ( me refiero a la informacion) esta totalmente politizada en mi nacion, multiples medios de comunicacion dan informacion a veces tan tergiversada k tienes que buscar mas de una fuente independiente para hacerte una idea de lo k realmente ha sucedido, pero no kiero hablar de ello.

    Desde este lado del atlantico siempre, digo siempre, se le va a ofrecer ayuda a cuba, decida lo k decida, pues el cariño y respeto no lo van a borrar ni dirigentes politicos de ambos pueblos, pues sigue latente en el verdadero pueblo cubano y español.

    y si España puede ayudar a la transicion democratica de Cuba, que lo haga, pues como pueblo amigo es su deber,de aunar esfuerzos y evitar cualquier tipo de violencia que pudiera desencadenarse por las inestabilidades politicas que se aconteceran.

    Cuba tiene la mano amiga de España,pero que le dejen REALMENTE manifestar su voluntad a Cuba, y si España tiene que intervenir para que se exprese validamente,que asi sea, por la paz y la libertad que deben reinar en esa Isla privilegiada.

    Atentamente, un saludo.

    Fer.

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  3. Tengo que volver a decirlo. No confundais la mierda de gobernantes que en España tenemos ahora con la opinión publica española. La ultima encuesta sobre intención de voto en España muestra una clara derrota de Zapatero ante el PP, por nada menos que cinco puntos de diferencia en el porcentaje. O sea, que si ahora mismo se hicieran elecciones nacionales, lo mas probable seria que ganase el PP, pero por desgracia, para las elecciones nacionales todavia nos quedan dos años y medio, y quien sabe si para entonces Zapatero ya habrá conseguido lavar su imagen.

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  4. La conciecia que aqui se hable esta presente en gentes de 40 para arriba y no en todos.

    La juventud española...no tirnr ningun tipo de apego por Cuba.Por que en los colehgios ya nadie explica la historia de españa.No la consideran como algo suyo.No tiene ni idea de su fundacion ni origenes.
    Preguntenle por las mulatas-os y por varadero o los mojitos.....

    Cada comunidad se limita a estudiar la parte de su territorio y si tienen algun tipo de lengua..olvidense del español.

    Si somos extranjeros en nuestro proopio pais con que ojos podemos mirar a cuba ???

    Nuestra juventud no sabria poner en n mapa a cuba...a no ser que haya ido de vacaciones antes...

    Y olvidense ya de historietas de franco y guerras civiles...por favor.....estan vds.en el jurasico....eso solo le interesa a los rojos españoles y anarquistas e independentistas

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  5. Le pese a quien le pese españa no se rompe.
    Lo que aquí hay es un elevado grado de libertad.
    Mas qisieran los estadounidenses ser tan libres como los españoles, que hasta nos permitimos criticar a nuestros gobiernos, aunque parece que estamos peleados, aquí no pasa nada.
    Lo que ocurre es que somos democratas.

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