El periodico digital de La Laguna
Por Miguel Leal Cruz
Posiblemente tendrían lugar procesos parciales de fusión étnica, puesto que a la llegada de los europeos conformaban pueblos pacíficos de fácil conquista, salvo los citados caribes. Cuando Colón llegó a la Gran Antilla, que llamó Juana en honor de la hija de los RRCC, una gran parte de los taínos producían sólo para el consumo interno de la comunidad y no para el trueque comercial, salvo excepción en alguno de los grupos étnicos que sí parece intercambiaban lo que producían (trueque como fórmula comercial más antigua). Desconocían por completo el valor de lo producido. Esa categoría económica, la de valor, no existía para ellos. Eran capaces de entregar a los conquistadores objetos de mucha utilidad en cantidades apreciables (arrobas de algodón hilado, cestas enormes de fruta, tabaco, etc.) a cambio de trozos de escudillas rotas, pedazos de vidrio, arcos de barril rotos, etc., según la misma fuente (pero no la etnia caribe).
Es evidente desde el plano geográfico dicho acceso poblacional, étnico y cultural. Con sólo mirar un mapa del mar Caribe apreciamos la privilegiada situación geográfica de la isla, hasta la cual no fue difícil acceder las poblaciones prehistóricas, desde Florida hasta los Cayos o Bahamas, al igual que desde Guatemala hacia el sur y desde Yucatán hasta la zona norte actual de Pinar del Río. Pero es que a través del Archipiélago de las Lucayas (hoy Bahamas) también resultaría viable saltando de isla en isla con ayuda de las canoas tradicionales. Asimismo, la otra etnia procedente de las costas de Venezuela (los belicosos caribes) usarán como puente de acceso a las Antillas Mayores el cinturón de islas que conforman las llamadas Menores, fácilmente accesibles desde América del Sur.
Es evidente desde el plano geográfico dicho acceso poblacional, étnico y cultural. Con sólo mirar un mapa del mar Caribe apreciamos la privilegiada situación geográfica de la isla, hasta la cual no fue difícil acceder las poblaciones prehistóricas, desde Florida hasta los Cayos o Bahamas, al igual que desde Guatemala hacia el sur y desde Yucatán hasta la zona norte actual de Pinar del Río. Pero es que a través del Archipiélago de las Lucayas (hoy Bahamas) también resultaría viable saltando de isla en isla con ayuda de las canoas tradicionales. Asimismo, la otra etnia procedente de las costas de Venezuela (los belicosos caribes) usarán como puente de acceso a las Antillas Mayores el cinturón de islas que conforman las llamadas Menores, fácilmente accesibles desde América del Sur.
Esto nos podría servir para entender la fórmula utilizada desde antiguo hacia Canarias, en sucesivas oleadas de pobladores desde África, o desde el Mediterráneo, e incluso desde las costas que bañan el Mar del Norte y Canal de La Mancha, por similitud de los grabados en piedra que aparecen en ambos espacios geográficos, también comunicados por corrientes marinas de norte a sur.
En torno a la presumible relación entre aborígenes canarios y antillanos, en especial taínos, el mismo Tejera Gaspar considera que no existe vestigio probatorio documental o arqueológico hasta ahora que pueda sustentar esa premisa. Si se obtienen datos que facilita el mismo Colón (y el Padre De Las Casas, después) que llegan a comparar aquellas gentes con “los canarios” como los hombres más parecidos a los que ha podido ver recientemente. Se añade que en la documentación colombina aparece citada, por confusión, una isla con denominación de Ínsula Canaria, como si se tratara de una de las Antillas… (época aquella de mínimo intercambio informativo, y además, poco fiable)
Según análisis desde determinada edición en proyecto, se mantiene que no existió relación con gentes o culturas entre ambos espacios geográficos situados a ambos lados del Atlántico, si bien existen errores y desinformación. Francesco Capello, embajador de los Reyes Católicos, confunde a “guanches” y caribes al referirse al Mencey de Taoro (Orotava), uno de los gobernadores más importantes de Tenerife… que tenía 2000 personas a sus órdenes (que, como guerreros, alimentaba a sus expensas) para añadir: en sus países (confunde con islas antillanas) comen carne humana… (aspecto éste que recoge Rumeo de Armas en “Alonso Fernández de Lugo en la Corte de los RR.CC. 1496-1523”) y que Tejera Gaspar aclara este error… Sin embargo, el propio Colón tras contactar físicamente con indígenas antillanos los define como “de aspecto semejante a los que antes había conocido en Gomera”. Desde este momento, en todas las ocasiones se refiere a los mismos como “aspecto y color de los canarios” y añade desnudos “ellos son del color de los canarios, ni blancos ni negros”, según recoge el mismo Almirante en su Diario. Evidentemente nada hace pensar que el origen étnico de ambas poblaciones territorialmente tan distantes para aquellas fechas pueda tener entroncamiento común, ni ninguna otra relación hasta la llegada de la primera expedición de Colón, desde Gomera (si bien como hemos dicho, no hay que descartar encuentros de ambas etnias anteriormente por la existencia de la corriente marina que parte de Canarias hasta Las Antillas, harto conocida por canarios emigrantes por la fuerza).
Al inicio de la conquista y colonización a partir de 1492, en especial en Cuba (y La Española) al menos tres grupos indígenas de diferentes niveles de desarrollo que han sido designados con los nombres de taínos, mayoritarios, siboneyes y guanajatabeyes, según la historiografía cubana. Se supone poblaron el territorio desde muchos siglos antes, si bien no se ha podido determinar con exactitud el tronco étnico del que proceden los siboneyes, ni el lugar exacto desde donde emigraron a Cuba. Pero se estima que pudieron haber partido de las penínsulas de Florida o Yucatán (tierra continental) sin descartar la posibilidad de que otros pobladores, los caribes, procedieran de las costas de la actual Venezuela o Guayana. Desde estos lugares, por razones que se ignoran, pero se intuye, tal vez por presión demográfica de otros pueblos del interior, consecuencia de guerras tribales, religiosas o de otro tipo, decidieron emigrar en sus canoas construidas con vaciado de troncos de árboles, utilizando el cinturón de islas que conforman las Antillas Menores. Sin embargo, el origen de los taínos parece más claro; los historiadores coinciden en señalar que proceden de los aruacos, a veces confundidos con los caribes (el citado pueblo indio de América del Sur) originarios de la costa norte de Venezuela y, a su vez, procedentes de la cuenca del Orinoco que se trasladan a Cuba.
(Continuará)
Muy interesante, ¿sabría algien que significan las abreviaturas que hay en la firma de Colón?
ResponderBorrarSaludos y ¡viva Cuba española!