sábado, 9 de julio de 2011

MAMBISES TODOS!. Por José Antonio Torrent-Aróstegui

Sr. Gral. Mario García Menocal, Presidente de la República de Cuba 
(1913-1921). 




 Hoy no voy a hablarles de los mambises muertos en combate, exonerados de toda falta en los tiempos posteriores a la independencia, porque sencillamente, no llegaron a ver esa etapa. No hablaré de Maceo, ni de Agramonte, ni de Céspedes, ni de Martí. Voy a hablar de los generales y doctores, ex-mambises todos, que ocuparon el poder en Cuba entre los años de 1902 y 1933.

 Tenemos para empezar a D. Tomás Estrada Palma, amigo personal de José Martí, en quién el apóstol delegó la dirección del Partido Revolucionario Cubano (Nueva York). Pro-yanqui confeso, producto de ellos mismos, que lo pusieron en el poder por medio de unas elecciones presidenciales - las primeras en Cuba - plagadas de irregularidades. Don Tomás fue un simpatizante de la Enmienda Platt - como también lo fue el Generalísimo Máximo Gómez, para sorpresa nuestra - a la cual no solo apoyó, sino que hizo uso de ella en 1906, al encontrarse incapaz de controlar los problemas internos de Cuba. Su gran mérito - como si esto fuese de verdad un mérito y no una obligación - fue administrar los fondos públicos con honradez. Por esta ''hazaña'' y en vista de lo que robaron los sucesores de Don Tomás, a este se le coronó con los laureles de ''mejor presidente de Cuba.’’

 El siguiente, el Gral. José Miguel Gómez. Ex-mambí, liberal, patriota de pura cepa. Presidente de la República de Cuba de 1909 a 1913. El pueblo lo tituló ''el tiburón, que se baña pero salpica,'' porque todo lo que robó lo supo compartir con sus colaboradores mas cercanos. Entre otra cosas, se hizo construir un palacete en el Paseo del Prado - pagado por el pueblo, por supuesto - de tales dimensiones y tanto lujo, que el gobierno norteamericano se lo compró para instalar en él la embajada estadounidense. Una vez que abandonó la presidencia embarcó en un viaje alrededor del mundo que duró dos años, también ''cortesía'' del erario del pueblo de Cuba.

 Llega 1914 y otro general mambí ocupa la presidencia de Cuba: El Gral. Mario García Menocal. Héroe de la batalla de Las Tunas! Un falso aristócrata que se hizo con el apoyo de toda la clase burguesa de Cuba, muchos de ellos simpatizantes de España en las guerras separatistas. También ladrón, pero mucho mas déspota que José Miguel. Este se atrevió, a pesar de la impopularidad de que gozaba, lanzarse a la re-elección y, milagrosamente, ganó de nuevo la presidencia de Cuba. Cómo se logró este milagro? Pues, muy fácil: En Matanzas, por ejemplo, votaron mas electores que los que figuraban en el registro electoral y es que, amigos míos, en Matanzas votaron los muertos! Si señores. Al cabo de tres días de las elecciones, ya proclamado Menocal ''presidente electo'' por un segundo periódo, se encontraron amarrados a las palmas del Valle de Yumurí, sedientos y medios muertos de hambre, a los presidentes de las mesas electorales designados por la Junta Electoral. Sin estos incómodos testigos, fue fácil dar el famoso ''cambiazo'' de las verdaderas urnas por las falsas, y dejar que los ''finados'' votaran por Menocal. Triunfo total!

 En 1921 gana el Dr. Alfredo Zayas, hermano amantísimo de Juan Bruno y mambí él mismo, aunque solo por algunas horas. La labor de este Dr. Zayas por la causa de la independencia todavía no está muy clara, pero si se sabe que recibía una cantidad mensual del estado por un libro de Historia de Cuba que nunca escribió y nadie sabe por qué. Además de corrupto y cínico hasta la médula, Zayas era un inmoral en su vida privada. Se casó con una prostituta que se llamaba María Saénz y que el pueblo bautizó con el nombre de ''María Centén,'' haciendo alusión a la ''tarifa'' que se cobraba en el burdel de donde había salido. Zayas se enriqueció tanto y tan descaradamente, que en el parque que se mandó construir había una estatua del presidente (de él mismo, señores) con una mano en el bolsillo y otra señalando el Palacio Presidencial. El pueblo cubano, en su choteo típico, decía que Zayas estaba diciendo: ''Lo que tengo aquí (en el bolsillo), lo saqué de allí (del Palacio).’’

 1925 nos trae nada menos que el triunfo del Gral. General Gerardo Machado, también ex-mambí, patriota irreprochable, con una hoja militar impoluta. No hay necesidad de ahondar mucho en la historia de este siniestro personaje, que hundió a Cuba en un sangriento caos. Machado provocó con su despotismo, su crueldad, su falta total de escrúpulos, la nefasta revolución del 33, que sirvió de puente a Batista y de abono a lo que hay hoy en Cuba.

 No sabemos, ni sabremos nunca, como hubiese sido el comportamiento de los mambises caídos, por causas obvias. Pero si sabemos que en los primeros 31 años de la República todo ex-mambí que ocupó la silla presidencial en Cuba, lo hizo para hacer, re-hacer o duplicar sus fortunas. Y a este ideal, a estos héroes, a esta historia fantástica de patriotismo, hemos estado y estamos ligados (atados) los cubanos.

 Y pobre del que no lo esté. Ese es un TRAIDOR! Ese es un VENDE PATRIA! Ese no quiere a Cuba!

Una opinión sobre Martí. Por José Antonio Torrent-Aróstegui

 Hoy voy a escribir algo que a aquellos que se han criado con el catecismo martiano debajo del brazo les va a resultar chocante. Se ha mistificado tanto la imagen del apostol, que de sus faltas nadie habla y cuando lo hacen lo adornan todo con el incienso sacro de estas tres palabras: Martí era AMOR.

 José Martí fué un gran pensador. Un hombre con una tremenda habilidad para convencer. Fué uno de los hombres de letras mas respetados de sus tiempos. Todo eso es cierto. También es cierto que dedicó casi toda su vida de adulto a combatir la injusticia y el despotismo, con su verbo y con sus ideas libertarias. Esto lo convierte en el heroe nacional que es. Todo esto es cierto y hasta loable.

 Sin embargo, Martí fué también un pésimo esposo y un peor padre. Su esposa, Carmen Zayas Bazán, lo abandonó y regresó a su casa familiar, porque Martí, mientras escribía cosas tan bonitas en ''La Edad de Oro,'' y amaba a los niños, que eran ''la esperanza del mundo,'' no proveía ni lo mas elemental para el sustento de su propia familia, de su propio hijo. Entregado de lleno a la ''causa'' de la libertad, dejó de lado la principal responsabilidad que tenía: SU ISMAELILLO. Su hijito adorado, que aparece en esta foto con él.

 El hijo de Martí, ya en tiempos de la república, no figuró en ningún movimiento político. No se dejó usar como bandera, ni como símbolo. No explotó jamás la ventaja que significaba compartir el mismo apellido con el ''heroe nacional.'' Esto no es más que un indicativo de que ese ''hijo amado,'' no amaba a su padre. Cómo podría hacerlo? Su padre abandonó sus deberes de esposo y de cabeza de familia y su madre - Carmen Zayas - virtió muchas lagrimas por culpa de este soñador que le tocó por marido. Soñador ... y ''picaflor.’’

 Si Martí hubiese vivido en los tiempos modernos tuviese un grueso expediente en el departamento de ''manutición del niño'' (child support). María Mantilla no nació de la nada. Fué fruto de un amor clandestino de José Martí. Habría que preguntar a Cesar Romero - actor norteamericano - cuales eran sus recuerdos del abuelito Martí. Pocos o ninguno. Tanto así que, aún siendo Martí la figura que es, este norteamericano, nieto del apóstol, rara vez ha hecho mención de su parentezco con Martí.

 En su andar por la vida Martí cometió verdaderas villanías de las que poco o nada se habla. Huésped del presidente de Guatemala tuvo la osadía de enamorar a su ingenua hija, a la que luego abandonó para casarse con Carmen. La hija de su amable anfitrión! La muerte de esta muchacha nunca ha estado muy clara. No se sabe si murió de muerte natural o si su muerte fué un suicidio. Martí resolvió la incognita escribiendo aquello de que ''dicen que murió de frío, yo digo que murió de amor,'' con la mayor desfachatez imaginable. 

 No es mi intención, para nada, manchar la imagen de José Martí. Mi intención es darle al hombre - o devolverle, mas bién - su condición de HUMANO y sacarle un poco de esa nube de incienso en que la historia lo ha embuido. Generaciones de cubanos han tratado a este hombre, con grandes defectos, como todo ser humano, con la misma reverencia que se trata a Dios. Es más, se le trata con mayor reverencia, porque Dios en Cuba ha venido a ocupar un papel casi inexistente en la vida de la mayoría de los cubanos.

CUBA ESPAÑOLA vs CUBA CAÓTICA. Por José Antonio Torrent-Aróstegui

 ( Foto de Internet )

 Ayer uno de esos seudo-demócratas que caminan por las calles de Miami, que no sabe escribir, pero si insultar, me llamó ''vende patria'' y un montón de otras barbaridades, por mis simpatías con la propuesta de CUBA ESPAÑOLA. Cuba tiene mucho más de española que lo que tienen de anglo-sajones los hawaianos y, sin embargo, Hawaii, a miles de kilometros de EU, es un estado de la Unión Americana. Lo mismo se aplica a Alaska.  Si EU adopta un territorio que le es ajeno (y vaya que sí lo son!), por qué no puede España hacer lo mismo con Cuba, que es parte de si misma?  Si pueblos tan diferentes y distantes, en distancia y en cultura, como lo son el hawaiano o el esquimal, han aceptado su anexión a la Unión Americana, sin perder sus propias identidades, por qué no lo puede hacer Cuba, que tiene tanto en común con la patria que un día fué?  Los cubanos tenermos derecho a contemplar esta opción, como mismo lo hicieron hawaianos o esquimales, y no por eso somos menos patriotas, ni menos cubanos. 

 Seamos sensatos.  No hay nada novedoso en el hecho de que un pueblo pequeño se asocie a uno grande.  Si el grande es, además, la vieja patria del pequeño, el hecho tiene más sentido aún. Es un hecho que la independencia de Cuba nos ha traido mas dolor y más pérdidas que todos los 400 años juntos en que nos gobernó España. Mi consejo, sin embargo, es ver esto como una nueva etapa, que es lo que sería.  Ni Cuba sería la colonia explotada de antaños, ni España sería la metropoli abusiva y cruel que dicen algunos que fué.  Este, señores míos, no es el siglo XIX.  Este es el Siglo XXI, donde paises se agrupan en organizaciones internacionales para hacerse fuertes.  Europa misma tiene hoy un solo pasaporte.  Ha borrado sus fronteras y son esto se ha engrandecido tremendamente.  Por qué nosotros tenemos que ajustarnos a una ideología caduca y a un viejo patrón que obviamente no nos ha funcionado?  CUBA LIBRE no existe.  No existió nunca.  El 1902 los gringos arregañadientes nos regalaron una parodia de República controlada por los intereses de EE UU.  En 1959 pasamos a ser un satélite del Soviet.

  Y ahora - por fín independientes! - somos esclavos de nosotros mismos.