- Primero, deseo darte las gracias por acceder a esta entrevista donde vamos a transitar un poco por dentro de tu persona. Quisiera comenzar por preguntarte ¿cuando comenzó tu inquietud por los caminos del arte?
JRM. Desde muy pequeño me interesó la pintura, el dibujo y sobretodo el crear, inventarme mi mundo y soñar con cosas bastante improbables.
- Tengo entendido que tu formación es mayormente autodidacta y que en realidad estudiasteis Medicina Veterinaria.
JRM. Si, cuando me gradué de la escuela Secundaria Básica, traté de entrar en la Academia San Alejandro de La Habana para estudiar pintura, pero no aprobé los exámenes. Creo que ese fue uno de los tantos reveses de mi vida que hizo que esta diera un giro de 180 grados y fuera para el Pre-universitario y después a la Universidad a estudiar una carrera con la cual no había afinidad. Gracias a Dios los caminos torcidos al final te llevan a encontrarte con el que en realidad tú querías transitar.
- Háblanos un poco de ¿como defines tu pintura y que pretendes con ella?
JRM. Esa pregunta siempre me cuesta trabajo responder pues en realidad no se bien como definirla. Tiene de sub-realismo, pero teniendo en cuenta que mi formación fue en un lugar donde este es la cotidianeidad, entonces no la veo como tal. Creo que el Expresionismo es una palabra que bien la definiría. En cuanto a que pretendo con ella, te diré que lo que hago es sólo la respuesta a una necesidad personal de expresarme mediante un lienzo, un papel etc., es quizás una forma de saciar a mí ser interno, es dejar escapar interioridades de mi alma, es complacerme a mi mismo. No hago una obra pensando en cuánto voy a cobrar por ella, la mercadería es algo que detesto.
¿Como es Jose Ramón Morales como persona?
JRM. Creo que soy muy cristalino aunque hay momentos en los que me convierto en translucido. Mi vida es un libro bastante abierto con algunos capítulos que están cerrados con llave. Pienso que antes de desaparecer de el mundo físico dejaré a esta encima de mi buró para que el libro sea leído por los que le interesen de la A, a la Z. Les aseguro que no tiene nada de aburridillo y si mucho de morbo. Soy bastante despistado y trato de pasar inadvertido a los lugares donde voy. No me interesa la fama. Mi privacidad personal es mi mayor tesoro. Me he inventado un mundo maravilloso y lo disfruto a plenitud. En mi vida personal he sido muy dichoso. En el arte no me interesa tener suerte pues esta es para los que no tienen talento. Todo lo que he soñado, con el tiempo se me ha dado. Creo que mi vida es muy fácil. Me preparo para el futuro pero disfruto el día a día en toda su plenitud. A veces el no hacer nada es parte de ese gozo. Hay veces que el perder el tiempo es disfrutarlo. Me gusta el campo, el contacto con el verde de la naturaleza, los animales. Le hablo a mis plantas, a mis perros, a mis pinturas. Todo en mi casa tiene vida y envejecen junto a mí y rejuvenecen conmigo. Mi casa soy yo y yo soy ella. Mi vida está reflejada ahí. Cuando estoy alegre ella luce resplandeciente. La energía en mi mundo es muy positiva y se ve cuando todas mis plantas florecen. Ellas me transmiten energía que yo convierto en una pintura. No me gusta hablar por teléfono ni hacer visitas pero estoy presente cuando un amigo me necesita. Tengo muchos defectos pero estoy en armonía con ellos.
- Si volvieras a nacer ¿que cambiarias o que harías diferente?
JRM. Muchas cosas. He tropezado muchas veces con lo mismo. He tratado de no ser yo para complacer a muchas personas. Desearía que el sexo me gustara menos y así no interfiriese tanto. Quisiera poder dominarlo. Buscaría la forma de ser mejor estudiante y practicar deportes.
-¿Crees en Dios?
JRM. Definitivamente si, pero confieso que nunca he leído la Biblia, me parece un libro aburridísimo y muy complejo el cual no entendería y me traería muchas confusiones. Desde ese punto de vista soy muy ingenuo y lo que hago es hablarle directamente a Dios con un lenguaje muy cubano de la calle como le hablo a mi mejor amigo. Quizás este Dios es inventado por mi imaginación, pero me funciona y es el único que quiero conocer. El otro del que hablan esta muy lejos y no se si sabe que yo existo. Me imagino que no tenga tiempo para mí. Este mio me comprende y me apoya. El otro es un tirano que critica mis defectos. En fin, que me quedo con este.
- Volviendo a tu pintura, háblanos un poco mas de ella.
JRM. Como he dicho en otras ocasiones, trato que mi pintura esté considerada cubana aunque haya sido creada allende del mar. Mis pueblos sugieren casas de campaña pero con los ventanales y vitrales tan propios de mi isla. Estos tienen movimientos, son monocromados y sólo los vitrales son coloridos. Mis edificios a veces se convierten en personajes, animales y objetos que ayudan a unir. Hay precipicios donde se ve a la nueva generación saliendo desde el centro de la tierra. Trato de que mis casas y edificios no se parezcan a los de ningún pintor cubano sólo las vidrieras te dejan saber que eso es Cuba. Por un tiempo soñé todas las noches que yo vivía en una aldea blanca (imagino que era en el sur de España). Mi casa era la primera con un patio interior, con un árbol grande. Había un precipicio y siempre me despertaba frente a este. Sin darme cuenta en mis obras aparecían estos hasta que un día le comenté a una amiga pintora sobre mis sueños, me dijo que se veían reflejados en mis pinturas. Hasta ese momento yo no me había percatado de eso. Creo que esa experiencia fue de una vida pasada la cual terminó lanzándome al vacío. Cuando pinto personas saliendo de estos es como la continuidad mediante una nueva vida. Mis naturalezas no son "muertas" o "vivas" como decía Frida Khalo, sino suicidas. Cuando una fruta se madura, esta se cae del árbol y en la caída se suicida, pues llega aplastada al piso. Mis arreglos florales son con las flores hacia adentro y los tallos hacia afuera pues creo que estos son parte esencial en el desarrollo de una flor y merecen también estar expuestos como adornos en un jarrón, etc. No me gustan los convencionalismos académicos. Recuerdo cuando hice una serie de desnudos en los que las personas salían de la pintura y sólo se veía parte del cuerpo. Ahí no había balance, el equilibrio no existía. Trato de hacer lo que no se hace. Igualmente en mi vida a veces desayuno arroz con moros, yuca con mojo y lechón asado a las 7:00am y a las 12:00 p.m. me tomo un vaso de leche y pan con aceite, etc., en fin hago lo que me place en cada momento. Si eso es sub-realismo, así es mi vida cotidiana.
- Ahora, dinos de tu famoso "Manto del Pudor"
JRM. Un día me hice la pregunta ¿Qué es el Pudor? Y la respuesta me llevó a la conclusión que este no es más que un pedazo de tela. Cuando nos lo quitamos de nuestras partes privadas, entonces perdemos el pudor. Así empecé una serie de pinturas en las que jugaba con este mediante, El Manto del Pudor que unas veces aparecía cubriendo a las personas y otra volando por los aires dependiendo la idea que yo quería expresar. Cuando presento a la nueva generación saliendo de un precipicio hacia la vida, esta arrastra el Manto del Pudor y después depende de ella si desea ser pudorosa o no. Hay tres cosas que son muy características en mi pintura; Los Precipicios, Mis Edificios con formas de Casas de Campaña o barras de Pan Cubano con sus Vidrieras o Vitrales y el Manto del Pudor.
- ¿Tengo entendido que en algunas de tus pinturas has plasmado situaciones que con el tiempo se han producido?
JRM. Esas son cosas a las que no tengo explicación. Me he dejado guiar por el subconsciente y he creado sin saber el verdadero significado y después con el tiempo he visto una respuesta muy clara sobre algo que en el futuro ocurre. Creo que eso le pasa a muchos pintores. El mundo interior es un misterio infinito. Nunca nos conocemos del todo. Somos como una computadora con muchos MB o mejor dicho GB y el problema está en como sacarle la información. Nuestro cerebro no trabaja ni con Windows ni Macintosh. Quizás en un futuro algún científico invente un programa que nos ayude a sacar toda la información que tenemos y de esta forma descubramos lo inteligente que somos. A lo mejor en ese momento perdamos la felicidad pues esta es inocencia, es ignorancia. Creo que un perro puede ser muy feliz pues no piensa. Al menos los míos tienen un futuro asegurado. No tienen que practicar sexo pues están operados, tienen su comida y agua fresca. Tienen mi amor y mi respeto, pues creo que su espacio les pertenece. Son libres dentro de su mundo. Corren, juegan y hasta hacen sus necesidades sobre las losas de cemento del patio pues no quieren ensuciarse las patas pisando la hierba, de todas formas saben que “daddy” la recoge con la pala. En fin yo me alimento con su felicidad.
- ¿Planes para el futuro con tu pintura?
JRM. Siempre tengo planes. Ahora estoy trabajando en una serie de pinturas para alguna exhibición solo. No se dónde la haré. Por ahora lo único que me preocupa es el proyecto en el que estoy involucrado. Tengo muchos bocetos archivados con ideas que considero muy buenas y a su vez controversiales algunas, pero así soy. Pienso que si fuera de otro modo entonces no seria ni artista ni pintor. Para mi lo importante es ser ambos para complacer a los amantes de las Bellas Artes. La pintura es el medio que utilizo para expresarme. Defino a los pintores en tres grandes grupos. 1)- Los que son muy buenos pintores pero no son artistas, te pueden copiar una pintura de Rembrant a la perfección pero no saben crear, 2) -Los que no son tan buenos pintores pero son artistas, saben crear y dan magia a sus creaciones., y 3)- Los que son muy buenos artistas y muy buenos pintores. De esos tres grupos yo me incluiría en el tercero pues se que tengo la capacidad para poder crear un Rembrant si me lo propongo, se dar magia a mis creaciones y poner a pensar a los espectadores, además mi mundo de imaginación es infinito y estoy haciendo muchas cosas para la eternidad...
JRM. Desde muy pequeño me interesó la pintura, el dibujo y sobretodo el crear, inventarme mi mundo y soñar con cosas bastante improbables.
- Tengo entendido que tu formación es mayormente autodidacta y que en realidad estudiasteis Medicina Veterinaria.
JRM. Si, cuando me gradué de la escuela Secundaria Básica, traté de entrar en la Academia San Alejandro de La Habana para estudiar pintura, pero no aprobé los exámenes. Creo que ese fue uno de los tantos reveses de mi vida que hizo que esta diera un giro de 180 grados y fuera para el Pre-universitario y después a la Universidad a estudiar una carrera con la cual no había afinidad. Gracias a Dios los caminos torcidos al final te llevan a encontrarte con el que en realidad tú querías transitar.
- Háblanos un poco de ¿como defines tu pintura y que pretendes con ella?
JRM. Esa pregunta siempre me cuesta trabajo responder pues en realidad no se bien como definirla. Tiene de sub-realismo, pero teniendo en cuenta que mi formación fue en un lugar donde este es la cotidianeidad, entonces no la veo como tal. Creo que el Expresionismo es una palabra que bien la definiría. En cuanto a que pretendo con ella, te diré que lo que hago es sólo la respuesta a una necesidad personal de expresarme mediante un lienzo, un papel etc., es quizás una forma de saciar a mí ser interno, es dejar escapar interioridades de mi alma, es complacerme a mi mismo. No hago una obra pensando en cuánto voy a cobrar por ella, la mercadería es algo que detesto.
¿Como es Jose Ramón Morales como persona?
JRM. Creo que soy muy cristalino aunque hay momentos en los que me convierto en translucido. Mi vida es un libro bastante abierto con algunos capítulos que están cerrados con llave. Pienso que antes de desaparecer de el mundo físico dejaré a esta encima de mi buró para que el libro sea leído por los que le interesen de la A, a la Z. Les aseguro que no tiene nada de aburridillo y si mucho de morbo. Soy bastante despistado y trato de pasar inadvertido a los lugares donde voy. No me interesa la fama. Mi privacidad personal es mi mayor tesoro. Me he inventado un mundo maravilloso y lo disfruto a plenitud. En mi vida personal he sido muy dichoso. En el arte no me interesa tener suerte pues esta es para los que no tienen talento. Todo lo que he soñado, con el tiempo se me ha dado. Creo que mi vida es muy fácil. Me preparo para el futuro pero disfruto el día a día en toda su plenitud. A veces el no hacer nada es parte de ese gozo. Hay veces que el perder el tiempo es disfrutarlo. Me gusta el campo, el contacto con el verde de la naturaleza, los animales. Le hablo a mis plantas, a mis perros, a mis pinturas. Todo en mi casa tiene vida y envejecen junto a mí y rejuvenecen conmigo. Mi casa soy yo y yo soy ella. Mi vida está reflejada ahí. Cuando estoy alegre ella luce resplandeciente. La energía en mi mundo es muy positiva y se ve cuando todas mis plantas florecen. Ellas me transmiten energía que yo convierto en una pintura. No me gusta hablar por teléfono ni hacer visitas pero estoy presente cuando un amigo me necesita. Tengo muchos defectos pero estoy en armonía con ellos.
- Si volvieras a nacer ¿que cambiarias o que harías diferente?
JRM. Muchas cosas. He tropezado muchas veces con lo mismo. He tratado de no ser yo para complacer a muchas personas. Desearía que el sexo me gustara menos y así no interfiriese tanto. Quisiera poder dominarlo. Buscaría la forma de ser mejor estudiante y practicar deportes.
-¿Crees en Dios?
JRM. Definitivamente si, pero confieso que nunca he leído la Biblia, me parece un libro aburridísimo y muy complejo el cual no entendería y me traería muchas confusiones. Desde ese punto de vista soy muy ingenuo y lo que hago es hablarle directamente a Dios con un lenguaje muy cubano de la calle como le hablo a mi mejor amigo. Quizás este Dios es inventado por mi imaginación, pero me funciona y es el único que quiero conocer. El otro del que hablan esta muy lejos y no se si sabe que yo existo. Me imagino que no tenga tiempo para mí. Este mio me comprende y me apoya. El otro es un tirano que critica mis defectos. En fin, que me quedo con este.
- Volviendo a tu pintura, háblanos un poco mas de ella.
JRM. Como he dicho en otras ocasiones, trato que mi pintura esté considerada cubana aunque haya sido creada allende del mar. Mis pueblos sugieren casas de campaña pero con los ventanales y vitrales tan propios de mi isla. Estos tienen movimientos, son monocromados y sólo los vitrales son coloridos. Mis edificios a veces se convierten en personajes, animales y objetos que ayudan a unir. Hay precipicios donde se ve a la nueva generación saliendo desde el centro de la tierra. Trato de que mis casas y edificios no se parezcan a los de ningún pintor cubano sólo las vidrieras te dejan saber que eso es Cuba. Por un tiempo soñé todas las noches que yo vivía en una aldea blanca (imagino que era en el sur de España). Mi casa era la primera con un patio interior, con un árbol grande. Había un precipicio y siempre me despertaba frente a este. Sin darme cuenta en mis obras aparecían estos hasta que un día le comenté a una amiga pintora sobre mis sueños, me dijo que se veían reflejados en mis pinturas. Hasta ese momento yo no me había percatado de eso. Creo que esa experiencia fue de una vida pasada la cual terminó lanzándome al vacío. Cuando pinto personas saliendo de estos es como la continuidad mediante una nueva vida. Mis naturalezas no son "muertas" o "vivas" como decía Frida Khalo, sino suicidas. Cuando una fruta se madura, esta se cae del árbol y en la caída se suicida, pues llega aplastada al piso. Mis arreglos florales son con las flores hacia adentro y los tallos hacia afuera pues creo que estos son parte esencial en el desarrollo de una flor y merecen también estar expuestos como adornos en un jarrón, etc. No me gustan los convencionalismos académicos. Recuerdo cuando hice una serie de desnudos en los que las personas salían de la pintura y sólo se veía parte del cuerpo. Ahí no había balance, el equilibrio no existía. Trato de hacer lo que no se hace. Igualmente en mi vida a veces desayuno arroz con moros, yuca con mojo y lechón asado a las 7:00am y a las 12:00 p.m. me tomo un vaso de leche y pan con aceite, etc., en fin hago lo que me place en cada momento. Si eso es sub-realismo, así es mi vida cotidiana.
- Ahora, dinos de tu famoso "Manto del Pudor"
JRM. Un día me hice la pregunta ¿Qué es el Pudor? Y la respuesta me llevó a la conclusión que este no es más que un pedazo de tela. Cuando nos lo quitamos de nuestras partes privadas, entonces perdemos el pudor. Así empecé una serie de pinturas en las que jugaba con este mediante, El Manto del Pudor que unas veces aparecía cubriendo a las personas y otra volando por los aires dependiendo la idea que yo quería expresar. Cuando presento a la nueva generación saliendo de un precipicio hacia la vida, esta arrastra el Manto del Pudor y después depende de ella si desea ser pudorosa o no. Hay tres cosas que son muy características en mi pintura; Los Precipicios, Mis Edificios con formas de Casas de Campaña o barras de Pan Cubano con sus Vidrieras o Vitrales y el Manto del Pudor.
- ¿Tengo entendido que en algunas de tus pinturas has plasmado situaciones que con el tiempo se han producido?
JRM. Esas son cosas a las que no tengo explicación. Me he dejado guiar por el subconsciente y he creado sin saber el verdadero significado y después con el tiempo he visto una respuesta muy clara sobre algo que en el futuro ocurre. Creo que eso le pasa a muchos pintores. El mundo interior es un misterio infinito. Nunca nos conocemos del todo. Somos como una computadora con muchos MB o mejor dicho GB y el problema está en como sacarle la información. Nuestro cerebro no trabaja ni con Windows ni Macintosh. Quizás en un futuro algún científico invente un programa que nos ayude a sacar toda la información que tenemos y de esta forma descubramos lo inteligente que somos. A lo mejor en ese momento perdamos la felicidad pues esta es inocencia, es ignorancia. Creo que un perro puede ser muy feliz pues no piensa. Al menos los míos tienen un futuro asegurado. No tienen que practicar sexo pues están operados, tienen su comida y agua fresca. Tienen mi amor y mi respeto, pues creo que su espacio les pertenece. Son libres dentro de su mundo. Corren, juegan y hasta hacen sus necesidades sobre las losas de cemento del patio pues no quieren ensuciarse las patas pisando la hierba, de todas formas saben que “daddy” la recoge con la pala. En fin yo me alimento con su felicidad.
- ¿Planes para el futuro con tu pintura?
JRM. Siempre tengo planes. Ahora estoy trabajando en una serie de pinturas para alguna exhibición solo. No se dónde la haré. Por ahora lo único que me preocupa es el proyecto en el que estoy involucrado. Tengo muchos bocetos archivados con ideas que considero muy buenas y a su vez controversiales algunas, pero así soy. Pienso que si fuera de otro modo entonces no seria ni artista ni pintor. Para mi lo importante es ser ambos para complacer a los amantes de las Bellas Artes. La pintura es el medio que utilizo para expresarme. Defino a los pintores en tres grandes grupos. 1)- Los que son muy buenos pintores pero no son artistas, te pueden copiar una pintura de Rembrant a la perfección pero no saben crear, 2) -Los que no son tan buenos pintores pero son artistas, saben crear y dan magia a sus creaciones., y 3)- Los que son muy buenos artistas y muy buenos pintores. De esos tres grupos yo me incluiría en el tercero pues se que tengo la capacidad para poder crear un Rembrant si me lo propongo, se dar magia a mis creaciones y poner a pensar a los espectadores, además mi mundo de imaginación es infinito y estoy haciendo muchas cosas para la eternidad...
DATOS PERSONALES
- LEONOR DE LA QUINTANA BARRIENTOS
- Tengo 45 años, por cosas del destino nací en Alemania, vivo en Tegucigalpa, Honduras, estudié historia del arte y musicología en Francia, tengo un hijo de 20 años al que adoro con todo mi corazon. Desde principios del año 2000 viajo por latinoamerica realizando cronicas y participando en proyectos culturales realizados por laembajada de mi pais natal.
