Puede ser acaso el pueblo responsable de lo llevado a efecto por el Gobierno del Sr. Estrada Palma? ¿Representaba este al pueblo cubano?
Fue legítimamente elegido?
La guerra contra España, hecha por cubanos y americanos nos dejo como consecuencia a estos últimos, que, por ser mas fuertes, se constituyeron sin nuestra voluntad en nuestros tutores, echándose encima la carga de educarnos, guiándonos en la vida política que íbamos a emprender.
Como dicen que a la fuerza ahorcan, no tuvimos más remedio que resignarnos a sufrir la lección y a los palmetazos que nos diera "el domine" que nos deparó el destino y el general Wood se encargó de nuestra educación hasta tanto que hay que y gracias a la buena voluntad del Presidente Roosevelt, se nos declara mayores de edad y el día 20 de Mayo de 1902 y se constituyó la república.
Pero tal vez por previsión del maestro, en vez de señalarnos el camino del bien, se nos puso en el del mal y como el terreno estaba bien abonado para ello, germinó con gran desarrollo la mala semilla.
El general Wood, que es "práctico" en la materia, práctico y nosotros lo mejoramos, el arte de comprar las conciencias con el temor o beneficio derrochar el caudal público y falsear la Ley.
Nos dejo sin un real; pero sin deudas y en estado de "prosperidad" el país: nos enseñó como se hacían elecciones fraudulentas y nos impuso el señor presidente Estrada Palma, contra la mayoría del pueblo cubano, que no queriéndose hacer cómplice de ése atentado, se retrajo……
Ya en el mes de Agosto de 1905, en un folleto titulado "La Cuestión Presidencial en Cuba" decíamos: "El que entregó a los americanos la revolución de 1895, maniatando al ejercito de Cuba, será tal vez el que ayude a hacer desaparecer la república de 1902"
Y al terminar nuestro trabajo dirigiéndonos entonces al Presidente de la república:
"Pero si por el contrario, el señor Estrada Palma continúa con el propósito de imponer por la fuerza su candidatura hoy, como lo impusieron antes a él los norteamericanos, tenga la seguridad de que tendrá su silla presidencial sobre un charco de sangre cubana y que le acompañaran allí las maldiciones de su pueblo, el anatema de la historia y el desprecio de los hombres honrados.
Creémos pues dejar demostrado que somos responsables de los hechos realizados por los hombres aquí por el general Wood
Y que cuando se agoten los medios pacíficos para obtener justicia, no hay otro remedio que la fuerza, argumento desesperado de los pueblos dignos.
El día 12 a las cuatro de la tarde, fondeó en el puerto de la Habana, el crucero americano "Denver" mandado por le comandante Colwell; este pasó inmediatamente a saludar al Presidente Estrada Palma, teniendo con el una larga conferencia.
Los representantes y senadores moderados acuden a Palacio para acordar con el Presidente lo que se debe hacer en la sección del Congreso que debía efectuarse al día siguiente.
El Gobierno sabiendo sabiendo ya lo que debía suceder, quería ponerse al resguardo de las arbitrariedades cometidas y de los desordenados gastos hechos y contaba con la disilidad del Congreso, para que asumiera las responsabilidades y justificara los desembolsos.
El general Loynáz con sus fuerzas estaba ya a las puertas de la Habana y se temía entrase de un momento a otro.
Tal vez, este temor motivó el que a petición del Presidente Palma, a las cinco de la tarde del 13, desembarcaran 125 soldados americanos del crucero "Denver" y acamparan en el Castillo de la Fuerza.
La impresión causada en el pueblo fue extraordinaria y penosa: el punto donde acamparon hizo creer, que habían desembarcado para proteger al presidente Palma.
Según manifestación posterior del comandante Colwell, el desembarco lo había efectuado para proteger los intereses de los norteamericanos; pues el Presidente le había manifestado, que no podía garantizarlos él, por no tener fuerzas suficientes..
---------------------------
La revolución es un crimen, dicen los partidarios del Gobierno: la revolución es una dolorosa necesidad dicen los libertadores.
Por la revolución ha venido el extranjero, dicen los primeros.
No, contestan los segundos, han venido porque ustedes, traidores, los llamaron y en su ciega soberbia, los han hecho quedarse contra su voluntad.
----------------------------------
La intervención
En la noche del 28, tan pronto llegó a la Habana a conocimiento de Mr. Taft la resolución de los moderados de no constituir el quórum del Congreso alguno, no existiendo ya gobierno alguno, asumió Mr. Taft el mando de la Isla de Cuba y en su consecuencia llamó al jefe de las fuerzas, General Alejandro Rodriguez y al jefe de la policía General Sanchez Agramonte, haciéndoles responsables del orden de la población.
Llamó al senor Zayas, al que dio un documento para que firmasen los presos y al juéz Arostegui le notifico que tan pronto como ese documento fuera firmado decretase la libertad de los procesados.
A petición del señor Estada Palma, que quiso dar una última nota contra la honradez cubana, desembarcaron 25 soldados americanos para custodiar la Tesorería.
En la mañana del dia 29 de de 1906, publicaba La Gaceta la siguiente proclama de Mr Taft:
"Al pueblo de Cuba"
El no haber el Congreso tomado acuerdo en cuanto a la renuncia irrevocable del Presidente de la República de Cuba o elegido a un sustituto, déja a éste país sin gobierno en una época en que perece gran desorden: y se hace necesario, de acuerdo con lo pedido por el Presidente Palma, que se tomen las medidas debidas, en nombre y por autoridad del Presidente de Estados Unidos, para restablecer el orden, proteger las vidas y propiedades en la Isla de Cuba e islas y cayos adyacentes y, con este fin, establecer un gobierno provisional.
El gobierno provisional establecido, por la presente orden y en nombre del Presidente de los Estados Unidos, solo existirá el que fuere necesario para restablecer el orden, la paz y la confianza publica, y una vez obtenidas estas, se celebraran las elecciones para determinar las personas a las cuales deba entregarse de nuevo el gobierno permanente de la República.
En lo que sea compatible con el carácter de un gobierno provisional establecido bajo la autoridad de los gobiernos de los Estados Unidos, este será un Gobierno Cubano, ajustandose en lo que fuese posible a la Constitución de Cuba. La bandera cubana se enarbolará, como de costumbre, en los edificios del Gobierno de la Isla. Todos los Departamentos del Estado, los gobiernos provinciales y municipales, incluso el de la ciudad de la Habana, funcionaran en igual forma que bajo la República de Cuba. Los tribunales seguirán administrando justicia; y continuarán en vigor todas las leyes que no sean inaplicables por su naturaleza, en vista del carácter temporal y urgente del gobierno.
El Presidente Roosevelt ha anhelado obtener la paz bajo el Gobierno Constitucional de Cuba, y ha hecho esfuerzos inauditos por evitar la presente medida. Demorar más, sin embargo seria peligroso.
En vista a la renuncia del Gabinete, hasta nuevo aviso los Jefes de los diferentes Departamentos, se dirigirán a mí para recibir instrucciones, incluso el mayor general Alejandro Rodríguez, Jefe de la Guardia Rural y demás fuerzas regulares del Gobierno y el Tesorero de la República, general Carlos Roloff.
Hasta nuevo aviso, los gobernadores civiles y alcaldes, también se dirigirán a mí para recibir ordenes.
Pido a todos los ciudadanos y residentes de Cuba, que me apóyen en la obra de restablecer el orden, la tranquilidad y la confianza pública.
Habana, Septiembre 29 de 1906
Wm H TAFT
Secretario de Guerra de los Estados Unidos.
Gobernador Provisional de Cuba.
Oficial F.R. Mc Coy
Bibliografia: