Espero que lo hayáis pasado fenomenal en Nochevieja y que este año venga con nuevas metas y deseos de hacer cosas en grande. Tenemos que superar la crisis, al menos en nuestro interior, y proponernos cosas y caminar hacia el cumplimento de ellas.
Por mi parte, a pesar de estar invitado para varias fiestas de Fin de Año, la Nochevieja decidimos pasarla en la tranquilidad del hogar, además con mis dos perras boxers, Cayetana de Alba y María José (no la Campanario, ni la Cantudo, esta es Morales de apellido). A las doce de la noche en la península, y viéndolo a través de TVE, tuvimos nuestro primer brindis y nos tomamos las primeras doce uvas, aunque eran las 6:00pm en Miami, después volví a preparar dos copitas con otras doce uvas cada una, para a las doce de la noche, hora de Miami, y viendo CNN desde la Gran Manzana en New York, volvimos a brindar con un antiespumante y de nuevo pedir doce deseos. Nos asomamos a la terraza del segundo piso a ver los fuegos de artificios que se veían desde el downtown de Miami y otros puntos de la ciudad. Mis perras como siempre, con mucho miedo al ruido, como si estuviesen presenciando una guerra, pero en fin, tranquilos, en casa, descansando después de varios días de fiestas, y pensando en los nuevos planes para nuevo año.
Definitivamente van a ser cosas nuevas para Cuba Española, en otro escrito hablare de eso. Por lo pronto sigan disfrutando del nuevo día y hagan planes, sueñen en grande, sean ambiciosos, nos merecemos todo lo bueno, así es que pidan y Felicidades!
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