Cuba fue una de las pioneras en América Latina en desarrollar la radio y la televisión, pues desde 1922 y auspiciada por la Internacional Telephone and Telegraph (ITT) en la isla caribeña fue montada la primera planta radial.
La primera emisora que transmitió en Cuba fue la 2LC de Luis Casas Romero, el 22 de Agosto de 1922. El 10 de Octubre de 1922, la primera transmisión de la PWX, es considerada oficialmente como el inicio de la radiodifusión, momento en el cual se transmitió – en español y en inglés - un discurso inaugural del entonces Presidente de la República Alfredo Zayas.
El inicio de la televisión en Cuba está marcado por dos nombres: Gaspar Pumarejo y Goar Mestre, y por la representación de dos monopolios transnacionales: Dumont y RCA Víctor. Gaspar Pumarejo era el dueño de la Unión Radio Televisión y se propuso traer la televisión a Cuba antes que Goar Mestre, que llevaba meses o quizás años fabricando el gran edificio de 23 y M.
Mientras Goar Mestre, formado en la Universidad de Yale, fabricaba un edificio, el de Radiocentro, concebido como un complejo de cine, radio y televisión, con una galería de tiendas, al estilo de Radio City de Nueva York, Pumarejo improvisaba unos estudios de televisión, en su propia casa de Mazón 52, esquina a San Miguel.
Era una carrera entre la Dumont, con quien Mestre tenía negocios, y la RCA que le enviaría los equipos a Pumarejo.
Las conversaciones se celebraron, llegaron los equipos desmontados de un estudio en los Estados Unidos, o sea, de uso, y comenzó la carrera. ¿Quién saldría primero?
Fue Unión Radio Televisión, quien lanzó al aire la primera señal de televisión comercial en Cuba el 24 de octubre de 1950 por el Canal 4, una de las primeras en América. En 1957 cuando alrededor de 50 países tenían televisión, en Cuba ya contaba 7 años de edad.
Fue Unión Radio Televisión, quien lanzó al aire la primera señal de televisión comercial en Cuba el 24 de octubre de 1950 por el Canal 4, una de las primeras en América. En 1957 cuando alrededor de 50 países tenían televisión, en Cuba ya contaba 7 años de edad.
Lo primero por el Canal 4 fue una cajetilla de cigarros Competidora Gaditana con un jingle de Ñico Saquito, y la inauguración contó con el primer control remoto en TV desde el Palacio Presidencial, con las palabras del entonces Presidente de la República, Carlos Prío.
Por la noche se transmitió una gran fiesta en los jardines de la casa, a la cual asistieron estrellas mexicanas, como Pedro Almendáriz y cubanas como Carmen Montejo y Raquel Revuelta, y, por supuesto, Gaspar Pumarejo en primer plano, ya famoso como locutor de radio. El 18 de diciembre de ese mismo año salió al aire el Canal 6, de Goar Mestre, con un programa dramático de tensión escrito por Marcos Behmaras y protagonizado por Alejandro Lugo.
En 1958 el país contaba con 25 transmisores de televisión con una potencia de 150,5 Kw, instalados en La Habana, Matanzas, Santa Clara, Ciego de Avila, Camagüey, Holguín y Santiago de Cuba. El servicio estaba organizado en tres cadenas nacionales con 7 transmisores cada una. Estas eran CMQ Televisión, Unión Radio Televisión y Telemundo. Los 4 transmisores restantes estaban instalados, 3 en La Habana y 1 en Camagüey.
Para llevar la señal televisiva desde los estudios, en La Habana, hasta los distintos transmisores, se contaba con una cadena de microondas de vieja tecnología instalada entre La Habana y Camagüey, de una sola dirección. La señal continuaba hasta Santiago de Cuba por radioenlaces inadecuados, lo que incidía desfavorablemente en la salida y la confiabilidad de las transmisiones.
El 6 de agosto de 1960, fue nacionalizada, junto a otras compañías norteamericanas, la "Cuban Telephone Company" y su filial "Equipos Standard de Cuba S.A.", esta última creada para el ensamblaje de centrales y aparatos telefónicos.
El 6 de agosto de 1960, fue nacionalizada, junto a otras compañías norteamericanas, la "Cuban Telephone Company" y su filial "Equipos Standard de Cuba S.A.", esta última creada para el ensamblaje de centrales y aparatos telefónicos.
El resto de las empresas privadas fueron nacionalizadas, paulatinamente, para pasar a formar parte del Ministerio de Comunicaciones. Las filiales de las empresas extranjeras que operaban los servicios internacionales, pasaron a ser supervisadas por el Ministerio, aunque las empresas mantenían su independencia económica.
La Radiodifusión y la Televisión, después de la nacionalización pasaron a integrar en ICRT (Instituto Cubano de Radio y Televisión) y en 1968 los transmisores de radio y televisión, así como los enlaces comenzaron a ser operados por el Ministerio de Comunicaciones.
Bibliografía; La televisión en Cuba
1 comentario:
Hola José Ramón, esto que cuentas está reflejado en la novela de Boris Izaguirri "Y de repente fue ayer", no con tantos detalles, pero de una forma muy similar.
Saludos
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